El director del Instituto Nacional de Migración (INM) en el estado de Chihuahua en México, Salvador González Guerrero, fue detenido en relación con el incendio que mató a 40 migrantes en un centro de detención a finales de marzo, según supimos por las autoridades.

De acuerdo con el registro de arrestos del Departamento de Seguridad del Estado, el funcionario fue arrestado la noche del domingo por agentes federales en Ciudad Juárez, localidad fronteriza de Estados Unidos en el norte de México, donde ocurrió la tragedia durante la noche del 27 al 28 de marzo.

Las autoridades mexicanas creen que el incendio fue iniciado por un migrante que prendió fuego a un colchón en la celda que compartía con otros 67 hombres para protestar por una posible deportación. Las imágenes de las cámaras de seguridad mostraron que una vez que estalló el incendio, ni el personal de inmigración ni los guardias de seguridad acudieron en ayuda de los migrantes encerrados en sus celdas cuando comenzó el incendio.

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Treinta y nueve de ellos murieron asfixiados en el acto y otro murió en el hospital. Un total de 19 guatemaltecos, 7 salvadoreños, 7 venezolanos, 6 hondureños y un colombiano perdieron la vida. La mayoría de los cuerpos de estos migrantes que esperaban poder llegar a Estados Unidos desde Ciudad Juárez han sido repatriados. Salvador González Guerrero sería acusado de dar la orden de cerrar la celda, según versiones de prensa. Trató de evitar su arresto con acciones legales, informaron medios locales.

Tras el incendio se había abierto una investigación por homicidio y el presidente Andrés Manuel López Obrador prometió que no habría «impunidad». Otros cuatro funcionarios del INM fueron detenidos tras la tragedia, junto con un guardia de seguridad y un migrante sospechoso de incendiar el colchón.