La policía evacuó el martes 8 de agosto dos campamentos de migrantes cerca de Dunkerque (norte), en un área que alberga a unos 700 exiliados que esperan llegar a Inglaterra por mar, según supimos por la prefectura y la asociación Utopía 56 que apoya a los migrantes.

“Se realizó una operación de refugio” en “dos campamentos ubicados en el dominio privado del gran puerto marítimo de Dunkerque”, indicó la prefectura a la AFP. En total, “130 personas fueron derivadas a centros de alojamiento”, dijo.

“También fueron detenidos contrabandistas” durante este operativo, “que se desarrolló en buenas condiciones”, movilizando “gendarmes, policías, prestadores de servicios sociales del Estado así como los equipos del gran puerto marítimo”, agregó sin más detalles. .

“El objetivo de estos albergues es proteger la vida de los migrantes y acabar con los campamentos improvisados ​​donde están bajo el control de redes criminales”, señaló.

Según un representante de Utopía 56, unas 700 personas (en su mayoría kurdos iraquíes, iraníes, sudaneses y eritreos) residían en la zona, que está salpicada de campamentos y donde las fuerzas de seguridad evacuan regularmente antes de que los exiliados se instalen allí precariamente.

Trece presuntos contrabandistas fueron detenidos allí y varias armas y municiones incautadas a principios de junio, como parte de una investigación abierta tras una serie de tiroteos que dejaron tres muertos y una veintena de heridos desde 2022.

Muchas de las personas desalojadas, cuyas tiendas fueron incautadas, intentaban reasentarse en los alrededores al final de la tarde, agregó el representante de Utopía 56. Entre ellos se encontraban familias y «una cincuentena de menores no acompañados», dijo adelantó. Según él, los pasos migratorios, ralentizados por el mal tiempo a principios de agosto, se «reanudaron» desde la costa norte de Francia, pero «con ventanas meteorológicas muy cortas» por la persistencia de condiciones meteorológicas desfavorables.

El prefecto de Pas-de-Calais, por su parte, anunció el 19 de julio la llegada de una empresa CRS adicional para frenar este tráfico migratorio, al día siguiente de la salida de los barcos de migrantes a plena luz del día bajo la mirada de los turistas.

En 2022, unas 46.000 personas cruzaron el estrecho para llegar a la costa inglesa. Cinco murieron y cuatro desaparecieron en estas peligrosas travesías, según el conteo de la prefectura marítima.