El Tribunal Supremo de Pakistán ordenó el martes la celebración de elecciones en la provincia más poblada del país, Punjab, en mayo, una decisión que la oposición encabezada por el ex primer ministro Imran Khan acogió de inmediato.
Pakistán ha estado sumido en una grave crisis política desde que Imran Khan fue derrocado del poder en abril de 2022 por una moción de censura y reemplazado por un frágil gobierno de coalición, encabezado por Shehbaz Sharif.
Siempre muy popular, el ex campeón de críquet ha seguido desde entonces manteniendo la presión sobre su sucesor para conseguir que las elecciones legislativas se celebren mucho antes de la fecha límite de octubre de 2023, buscando el Gobierno por el contrario retrasarlas lo máximo posible. El partido de Imran Khan, Pakistan Tehreek-e-Insaf (PTI, Pakistan Justice Movement), disolvió en enero las dos asambleas provinciales que controlaba en Punjab (centro este) y Khyber Pakhtunkhwa (noroeste).
La Constitución exige que las elecciones se celebren dentro de los tres meses siguientes a la disolución de una asamblea provincial. Pero la Comisión Electoral (ECP), aduciendo razones económicas y el deterioro de la seguridad en el país, había decidido posponer estos comicios a octubre, para hacerlos coincidir con los legislativos, cuya fecha aún no ha sido anunciada.
Leer tambiénLos talibanes amargan la relación entre Kabul e Islamabad
Sin embargo, la Corte Suprema, que se había apoderado de este expediente, consideró el martes que el aplazamiento de las elecciones en Punjab era «inconstitucional, sin autoridad ni base legal». “Ni la Constitución ni la ley le dan a la Comisión la facultad de posponer la fecha de las elecciones más allá de 90 días”, sentenció en una sentencia consultada por AFP.
El Tribunal ordenó al gobierno liberar los fondos necesarios para la organización de las elecciones en Punjab, que deberían realizarse el 14 de mayo. También le pidió al PTI que le enviara una solicitud para decidir también la fecha de las elecciones en Khyber Pakhtunkhwa. Fawad Chaudhry, un alto funcionario del PTI, calificó el fallo como una “gran victoria” para Imran Khan.
Enredado en una multitud de casos legales, Imran Khan afirma estar en el centro de un complot para evitar que se presente a las elecciones legislativas. A mediados de marzo, la policía intentó arrestarlo en su casa, lo que provocó enfrentamientos con simpatizantes del PTI. Finalmente, un tribunal ordenó a las fuerzas del orden que se retiraran y la orden de arresto emitida contra él en el caso se levantó más tarde. En noviembre, fue herido de bala durante un mitin político, un intento de asesinato que culpó a su sucesor.