TOPS
Silencioso en la liga durante un mes, Joao Pedro fue el gran hombre detrás del rotundo triunfo del Brighton sobre el Tottenham (4-2). Escurridizo y sobre todo pasador decisivo en el marcador inicial (12º), hizo el descanso transformando con calma su penalti (23º). Un ejercicio favorito (100% de éxito) con el que anotó un doblete (75º) para sellar su trofeo de mejor jugador del partido. ¿Solo hipo? Podría haber acabado con todo el suspense antes del descanso, pero pecó de avaricia (45º).
Menos animados desde hace varios meses en el campeonato, las Gaviotas se han llenado para las vacaciones. Ciertamente en gran peligro al principio y al final de la segunda parte, cuando el Tottenham todavía creía en ello, el equipo de De Zerbi recuperó sin embargo su fuerza colectiva, simbolizada por el don de sí mismo pero también y sobre todo por sus fases de juego rápidas y bien engrasadas. . Fútbol de champán que ha convertido al Brighton en uno de los equipos más apasionantes de los últimos meses.
Por primera vez esta temporada, el Arsenal no marcó un solo gol en casa. Culpa de un gran Alphonse Areola, gran artífice del sorprendente triunfo del West Ham en el Emirates (0-2). Un robo con manos enguantadas, las del ex parisino, en pleno renacimiento del este de Londres. Primero perfecto ante Saka (30º) antes de ser salvado por su poste, el número 3 francés magnetizará los balones al final del partido hasta un último vuelo ante Odegaard (90º). Ocho salvamentos y una gran actuación para privar a los Gunners del título de campeón de otoño.
fracasos
Era la última noche de un Boxing Day ya prolífico, por lo que Tottenham aprovechó la oportunidad para pagar una última ronda de regalos. Escandalosamente apática, como en los dos primeros goles (12, 23), abrumada en el duelo, la retaguardia de los Spurs tiene gran parte de mérito en el calvario de la tarde. Sin la avaricia de Pedro, servida… por Davies, defensa visitante, la factura podría haber sido aún más cara para Postecoglu, cuya defensa, por tanto, sigue siendo un trabajo en progreso. 28 goles encajados a mitad de camino son demasiados para llegar al partido contra los “Cuatro Grandes”.
Principal artífice de la reciente reactivación de los Spurs (4 goles en 3 partidos), el brasileño sufrió un violento regreso a la tierra. Pero en general tuvo mala suerte. Aparte de dos saques neutrales fallidos, el ex Everton estrelló un balón en el palo antes del descanso antes de recibir dos goles por fuera de juego (46.º, 62.º). Unos segundos más tarde, observará impotente el gol del nocaut antes de marcharse. Cuando no quiere.
Evidentemente poco ayudado por la repetición de los encuentros, el trío Martinelli-Jesús-Saka mostró este jueves por la tarde un inusitado desamparo. Si el último tuvo sus posibilidades (30, 40, 63, 78), sus amigos, así como él en secuencias, habrán mostrado demasiada prisa en el último gesto. A su llegada, el total de 30 tiros de 8 a portería, y por tanto ningún gol, no favorece al trío mágico, punta de lanza habitual de una banda de Arteta atrapada en todas las zonas por el West Ham.