Expertos de la ONU especializados en racismo destacaron el viernes 5 de mayo el “agotamiento” de la comunidad negra tras una visita a Estados Unidos, donde el legado de la esclavitud debe ser tomado en serio por las autoridades “a todos los niveles”, creen. Durante 12 días, el equipo del “Mecanismo de Expertos Independientes de la ONU para Promover la Justicia Racial y la Igualdad en el Contexto de la Policía”, creado tras la muerte en 2020 del afroamericano George Floyd, se reunió con víctimas, representantes de la sociedad civil, el poder judicial. sistema, sindicatos policiales, funcionarios federales o locales, en Washington, Atlanta, Los Ángeles, Chicago, Minneapolis y Nueva York.
“En Estados Unidos, las desigualdades raciales se remontan a la fundación del país. Y no habrá una solución rápida. Esto requiere un enfoque integrado en todos los niveles de poder”, comentó Tracie Keesee, miembro del equipo, en una conferencia de prensa. “Esto merece más que un eslogan y exige una reforma de liderazgo integral y fuerte en todos los niveles”, agregó, y señaló que “la esclavitud y la discriminación legal han dejado un legado profundamente arraigado que se siente en la vida cotidiana de las personas de África. descendencia». Por lo tanto, “incluso hoy, la discriminación racial impregna los encuentros con las fuerzas del orden, desde el primer contacto hasta el arresto, la detención y la condena”, insistió.
Y sus entrevistas destacaron «el agotamiento de la comunidad negra, un agotamiento de ser negro, (…) presente en la vida cotidiana». “Los policías negros coincidieron con la comunidad en este agotamiento general” vinculado al “estrés de ser negro en Estados Unidos”, subrayó el experto. El equipo, que preparará un informe más detallado, saludó en un comunicado de prensa «las diversas iniciativas prometedoras, incluso a nivel estatal, tomadas por las autoridades para combatir la discriminación racial que afecta a las poblaciones de origen africano». Pero los expertos destacaron su sentido de «urgencia y responsabilidad moral para hacerse eco del dolor desgarrador de las víctimas y sus llamamientos rotundos para que los responsables rindan cuentas».
Este mecanismo fue creado por el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en 2021, un año después del asesinato de George Floyd por un policía blanco, para investigar las acusaciones de violencia policial por motivos raciales en todo el mundo.