El nuevo año comenzó este lunes con un terremoto de magnitud 4,1 en la región de Los Ángeles, California, anunció el Instituto Americano de Geofísica (USGS), sin que aún se hayan reportado víctimas ni daños. Un fotógrafo de la AFP sintió un terremoto «muy leve» a primera hora de la mañana en Culver City, en el condado de Los Ángeles, suficiente para despertarse con el temblor.

Otro también mencionó un “pequeño” terremoto en Lawndale, más cerca del epicentro, ubicado en el Océano Pacífico según el USGS. El terremoto ocurrió a 12 millas de la costa de Rancho Palos Verdes, que está a unas 50 millas de Los Ángeles, según el USGS.

En diciembre de 2022, al menos dos personas murieron en el norte de California tras un potente terremoto frente a la costa estadounidense, que provocó deslizamientos de tierra y cortó el suministro eléctrico a decenas de miles de personas.

Este estado del oeste de Estados Unidos se ve sacudido periódicamente por terremotos. Según los sismólogos, es casi seguro que en las próximas décadas un terremoto capaz de causar una destrucción generalizada, el famoso «Big One», azotará California. El nuevo año también comenzó con una serie de potentes terremotos en Japón que causaron importantes daños.