Una solución radical. Según la ministra del Interior, Sarah Dines, el gobierno británico está considerando enviar a sus inmigrantes irregulares a la isla volcánica de Ascensión, a casi 6.500 kilómetros del Reino Unido. “Esta crisis en el Canal de la Mancha es urgente, debemos analizar todas las posibilidades y lo estamos haciendo”, dijo a Times Radio.
Ante los cruces masivos del Canal de la Mancha, Reino Unido busca salir de esta crisis migratoria. La idea de utilizar este pequeño trozo de tierra perdido en medio del Atlántico fue sugerida hace tres años por la antecesora de Sarah Dines. Poco a poco, se prefirió un acuerdo con Ruanda a esta solución.
El 14 de abril de 2022, Boris Johnson, entonces primer ministro, presentó un plan para enviar a Ruanda a los solicitantes de asilo que llegaron ilegalmente a suelo británico. Un plan que había despertado una fuerte oposición, especialmente por parte de la ONU. El acuerdo migratorio entre el país africano y el reino de Carlos III estaba a punto de finalizar. En diciembre pasado, el Tribunal Superior incluso declaró legal el proyecto. Desafortunadamente para los partidarios de esta política migratoria, el Tribunal de Apelación finalmente dictaminó que estaba prohibido enviar inmigrantes a Ruanda. Inmediatamente después de esta decisión, Rishi Sunak apeló ante la Corte Suprema. “Confiamos bastante en que la política con Ruanda es legal. El Tribunal Superior y el Lord Presidente del Tribunal Supremo determinaron que ese era el caso, por lo que nos estamos enfocando en eso”, dice Sarah Dines.
A pesar de este optimismo mostrado, la pista de la Isla Ascensión sigue siendo posible, según el ministro. En detalle, este plan prevé el retorno a través de barcos de los solicitantes de asilo y los inmigrantes irregulares presentes en territorio británico. Cualquier persona que haya intentado ingresar ilegalmente al Reino Unido también tendrá prohibido permanentemente la entrada al país. Según The Guardian, el proyecto había sido juzgado como «inverosímil» por una fuente ministerial, en particular por razones financieras. «Costaría al menos un millón de libras por persona enviada allí para hacerlo», dijo el ex ministro Jacob Rees-Mogg a GB News. Actualmente, no existe un centro de recepción de migrantes en la isla. Aún así, según The Guardian, los últimos intercambios sobre el tema tuvieron lugar en octubre pasado.
