Una segunda ola. Fuertemente animados por la Banque de France y Bercy, los bancos franceses crearán un sistema de “revisión” de las solicitudes de préstamos inmobiliarios rechazadas, anunció el miércoles su federación profesional, en un contexto de crisis inmobiliaria. “Estamos poniendo en marcha un nuevo sistema de apoyo temporal destinado a los clientes que han tenido dificultades para realizar sus proyectos inmobiliarios”, comentó Nicolas Namias, presidente de la Federación Francesa de Banca (FBF), también presidente del consejo de administración de BPCE. en un comunicado de prensa. .

“El objetivo es que comprendan los motivos de la decisión de su banco y, si se cumplen las condiciones, beneficiarse de una revisión de su expediente crediticio”, continuó. Este segundo examen de los préstamos inmobiliarios no concedidos se realizará a petición de los clientes. Se referirá tanto a los expedientes de financiación de la vivienda principal como de la segunda residencia y de inversión en alquiler. Este sistema será implementado por los bancos gradualmente durante febrero de 2024, y se aplicará hasta finales de diciembre de 2024, especifica la FBF. Quedarán excluidos los solicitantes de préstamos inscritos en los ficheros de incidencias de pago gestionados por la Banque de France (FICP, FCC).

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“Cada establecimiento bancario determina los métodos de organización e información de sus clientes”, añade la federación. La idea de este recurso fue lanzada el 17 de noviembre por el gobernador de la Banque de France, François Villeroy de Galhau, con motivo de la conferencia anual de la Autoridad de Control y Resolución Prudencial (ACPR). El Ministro de Economía, Bruno Le Maire, hizo lo mismo dos semanas después, al igual que el Alto Consejo de Estabilidad Financiera (HCSF) a principios de diciembre.

Las autoridades públicas intentan reactivar la máquina de crédito inmobiliario, paralizada por la brutal subida de los tipos oficiales del Banco Central Europeo (BCE), inmediatamente trasladada en su balanza por los bancos atentos a sus márgenes. Muchos solicitantes de préstamos, lógicamente, han preferido posponer sus planes de compra, con la esperanza de compensar un poco un precio de venta que todavía lucha por bajar. La Banque de France espera que la producción mensual de nuevos préstamos para vivienda -excluidas las renegociaciones- alcance los 8.600 millones en diciembre, un mínimo desde enero de 2015.