(Montreal) El regreso de las lluvias, después de varios días de buen tiempo, permite al Ministerio de Recursos Naturales y Bosques levantar la prohibición de hacer hogueras en los bosques y sus proximidades en determinadas regiones, a partir de las 8 h del sábado.

La decisión de modificar el territorio afectado por esta veda se tomó en colaboración con la Sociedad para la Protección de los Bosques Contra los Incendios (SOPFEU) debido a las precipitaciones recibidas en el oeste y sur de la provincia.

El martes, el ministerio impuso esta prohibición en una decena de regiones, afectadas total o parcialmente, para evitar que se produjeran incendios forestales en un contexto en el que el calor planteaba un riesgo «extremo» de incendio.

La prohibición se mantiene para los sectores afectados de Nord-du-Québec, Côte-Nord, Saguenay-Lac-Saint-Jean, Bas-Saint-Laurent y Gaspésie.

Por lo tanto, en los sectores afectados sigue estando prohibido encender fuego abierto –definido como “cualquier fuego que arda libremente o que pueda propagarse libremente”– en un bosque o cerca de él, bajo pena de multa de entre 500 y 500 dólares. $50,000.

Están prohibidas las fogatas, los fuegos artificiales y el uso de instrumentos que puedan producir chispas. Siguen estando permitidos los incendios en las instalaciones previstas a tal efecto, que estén equipadas con apagachispas.

Según la Sociedad para la protección de los bosques contra los incendios (SOPFEU), un frente eléctrico ocurrido el miércoles por la tarde provocó nuevos incendios en las regiones de Côte-Nord y Saguenay-Lac-Saint-Jean.

El sábado por la mañana, 15 incendios forestales estaban activos en Quebec, particularmente en la Alta Costa Norte. En su mayoría estaban controlados o contenidos.

Desde el inicio de la temporada, 173 incendios forestales han destruido 1.730 hectáreas. La media de los últimos diez años a la misma fecha es de 229 incendios.