La Fuerza Aérea de Ucrania dijo el sábado que había derribado nueve de los 14 drones lanzados por Rusia en el sur y centro de Ucrania durante la noche del viernes al sábado. «Ucrania destruyó nueve drones enemigos en las regiones de Dnipro, Odessa, Mykolaiv y Zhytomyr», dijo la Fuerza Aérea de Kiev.
La mayoría de los drones Shahed de fabricación iraní tenían como objetivo la “infraestructura energética” en la región central de Dnipro, donde miles de personas se encuentran sin electricidad.
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Los cortes de energía afectaron principalmente a Kryvyi Rig, la ciudad natal del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky. El gobernador de la región de Dnipro, Serguii Lysak, afirmó que 15.000 residentes de Kryvyi Rig se quedaron sin electricidad tras el ataque con aviones no tripulados.
Los incendios provocados por las huelgas afectaron a «dos salas de calderas» de la ciudad y «algunas familias se encuentran sin suministro de agua», añadió, indicando que «no se registraron muertos ni heridos», pero que dos viviendas resultaron dañadas.
El jefe de la administración militar de la ciudad, Oleksandr Vilkul, indicó por su parte que las empresas energéticas «introducirán cortes de emergencia» en la ciudad. El tranvía de alta velocidad Kryvyï Rig dejará de funcionar y parte de algunos hospitales utilizarán generadores.
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El Ministerio de Energía de Ucrania dijo que estaba trabajando para restaurar la infraestructura crítica.
Desde que comenzó su invasión de Ucrania hace casi dos años, Rusia ha atacado la infraestructura energética del país, dejando a miles de personas sin calefacción durante una intensa campaña el año pasado.