Unas semanas después del final de su accidentada colaboración con su patrocinador Banque Populaire, Clarisse Crémer debería emprender un nuevo desafío que le permita estar al comienzo de la próxima Vendée Globe. La navegante debía participar en la vuelta al mundo en solitario a bordo… del barco que estaba destinado a ella y que la Banque Populaire había comprado el año pasado, unos meses antes del sonado divorcio entre las dos partes.
Según la web de Figaro Nautisme, el patrón Alex Thomson (segundo en la Vendée Globe 2016) ha adquirido este Imoca (ex-Apivia) perteneciente a Charlie Dalin que lo vendió al final de la Route du Rhum 2022. No teniendo intención de ser en el arranque de la edición de 2024, el galés deberá alquilarle el barco al parisino de nacimiento. Sin embargo, tendrá que encontrar financiación y montar rápidamente un proyecto con un nuevo patrocinador.
Sin embargo, el archivo parece estar en el camino correcto. “Clarisse sin duda sorprenderá a mucha gente al lograr poner en marcha un gran proyecto deportivo y de marketing en unas pocas semanas”, así deslizó un bien informado miembro de la clase Imoca.
Siempre según Figaro Nautisme, el marinero de 33 años y la joven madre también deberían poder beneficiarse de una invitación para participar en la próxima Vendée Globe sin tener que completar todas las casillas de calificación. Un obstáculo en el origen de su separación de Banque Populaire.
De hecho, después de dar a luz a su hijo, no pudo acumular las millas necesarias para su registro. Siendo la dirección de carrera inflexible en el punto del reglamento, Banque Populaire se vio obligada a despedir a Clarisse Crémer. Una decisión que había sido fuente de una gran controversia. Dos semanas después, el grupo bancario anunció su retiro total de la Vendée Globe 2024.