El Gobierno prepara para mediados de septiembre un plan contra la violencia infantil, centrado en la violencia sexual, según ha informado la secretaria de Estado de la Infancia, Charlotte Caubel, que deberá detallar los ejes en el Consejo de Ministros de este miércoles.
“Hoy estamos en una situación trágica: un niño muere cada cinco días en su entorno familiar como consecuencia de la violencia. De dos a tres niños por clase experimentarán fenómenos de incesto. Esto afecta a uno de cada diez adultos. Un niño es agredido sexualmente cada tres minutos”, dijo Caubel a la AFP.
Quiere «hacer un llamado a sus colegas» del gobierno: «la lucha contra la violencia contra los niños debe convertirse en una lucha digna de la lucha que hemos librado contra la violencia contra las mujeres», dijo. La secretaria de Estado quiere emitir «una campaña de choque tipo seguridad vial» para sensibilizar a la sociedad sobre el incesto, a mediados de septiembre poco después del inicio del curso escolar.
“Los números son astronómicos y nadie quiere verlos. Todos necesitan abrir los ojos, que todos los adultos se sientan preocupados”, explica la Sra. Caubel.
El plan también tiene como objetivo equipar a los profesionales en contacto con niños para detectar y denunciar mejor la violencia sexual: se implementará capacitación basada en las herramientas desarrolladas por la Comisión Independiente sobre Incesto y Violencia Sexual contra Niños (Ciivise) .
El plan también pretende crear una plataforma para apoyar y orientar a los profesionales que tienen sospechas. “Me gustaría que el gobierno entregue un discurso que movilice a la sociedad: no le pasa solo a los demás, es masivo, pon atención a tus hijos y pregúntate sobre el comportamiento que tienes con ellos”, declara la Sra. Caubel. Este plan 2023-27 tomará el relevo del plan contra la violencia contra la infancia 2020-22 puesto en marcha durante el primer quinquenio.
La lucha contra la violencia contra los niños debe abordarse con “un enfoque colectivo y transversal”, porque la violencia se da en la escuela, en el club deportivo, en los medios digitales, señala Caubel, juzgando que es necesario “empoderar a los padres de intimidar a los niños.
Tras el suicidio de la joven Lindsay víctima de acoso, “los jóvenes formaron un grupo ‘Estaré en tu funeral y estoy encantada’”, remarca, juzgando que “ahí también estamos en una pendiente de descivilización”.