Érase una vez un pequeño bolso acolchado popular entre la mujer a la que entonces llamaban “la princesa de corazones”. Son mediados de los años 90 y la princesa Diana viaja a París para inaugurar una gran retrospectiva de Cézanne junto a la primera dama de Francia, Bernadette Chirac. En esta ocasión, le regaló un pequeño bolso de piel acolchado de la línea cannage de Dior. Aún no se llama Lady Dior, pero a fuerza de llevarlo en brazos de su real propietaria, en particular durante la Met Gala de Nueva York en 1996, el famoso bolso se convertirá en uno de los primeros it-bags de la época moderna. “¡El bolso será un gran éxito, los vendedores aún recuerdan las colas de clientes que venían a recoger su pedido!”, dijo recientemente a Le Figaro Soizic Pfaff, director de patrimonio de la casa Dior. Mientras tanto, la casa francesa pide permiso a la nueva divorciada más fotografiada del mundo para cambiarle el nombre a Lady Dior.
Una historia de una princesa y un bolso que no pasó desapercibida para una niña de Sant Cugat del Vallès, en Cataluña, que se convirtió en la ultrainfluyente estrella del pop, Rosalía. En 1996, tenía sólo cuatro años pero recordaba: “Lady Di era un ícono de estilo en su época, su estilo tenía algo de atemporal y moderno. Por eso sus conjuntos siguen siendo tan populares hoy en día. Vestía con mucha elegancia buscando la comodidad y manteniendo su personalidad. Es muy lógico que ella fuera la primera embajadora de Lady Dior y como podéis imaginar, es un gran honor para mí convertirme en su nueva musa. » Porque ya es oficial: la casa Dior ha confiado al fotógrafo neoyorquino Collier Schorr la nueva campaña del famoso bolso. Imágenes en blanco y negro tomadas del cantante ganador de varios premios Grammy que pronto se exhibirán en formato de 4 por 3 en el metro y en las paradas de autobús de ciudades de todo el mundo.
Una elección audaz ya que la joven, seguida por casi 28 millones de personas en Instagram, desafía los códigos de la industria musical y de la moda. Su música, una mezcla de flamenco y ritmos latinos, es regularmente acusada de apropiación cultural. En cuanto a estos looks atrevidos, suelen aparecer en los titulares. Cercana a la marca sueca Acne Studios o a Riccardo Tisci, mientras él trabajaba en Burberry (ambos diseñaron sus trajes escénicos), cultiva un look rockero neogótico que contrasta con las filas de la alta costura parisina. Pero, ¿quién sedujo a Maria Grazia Chiuri, directora artística de las colecciones femeninas de Dior? “Me encanta su música y, en particular, el disco El mal querer, del que utilicé extractos para la banda sonora de nuestro desfile crucero 2023 en Sevilla (en junio de 2023, nota del editor), explica la estilista romana. Lo que más me fascinó de este álbum fue la forma en que este joven artista supo reinterpretar y actualizar los sonidos y la vestimenta asociados con el flamenco transponiéndolos a un lenguaje contemporáneo. Cuando finalmente nos conocimos, me di cuenta de que la modernidad de su feminidad la convertiría en una embajadora perfecta. »
Además, a la bella le quedó como un guante la emblemática chaqueta Bar de la casa que lució durante una reciente Semana de la Moda y el entallado tubo negro con cola larga durante la última Met Gala que destacó junto a sus “compañeras” todas con outfits florales según sobre el tema de la velada “Bellezas durmientes: el despertar de la moda”. Pero a Rosalía no le importa. En su éxito Saoko, lanzado en 2022, ¿no canta “Yo soy muy mia, so me transformo, una mariposa yo me transformo, make up de dra queen yo me transformo.me contradigo yo me transformo, yo soy toda” Las cosas yo me transformé”? Lo que, en el lenguaje de Molière, se traducirá como “Soy realmente yo, me transformo, una mariposa me transformo, un maquillaje de drag queen, me transformo, me contradigo, me transformo, soy todas estas cosas, me transformo mí mismo. » Según la cantante, la moda puede ser un vector de emancipación femenina: “Es bien sabido que la ropa es una forma de expresión, un vehículo, un puente. Podemos vestirnos funcionalmente o podemos vestirnos para sentir. Puedes usar una pieza o accesorio y, dependiendo de cómo lo uses, dependiendo del contexto, hacer una declaración. Hay algo mágico en todo esto, en la forma en que el mundo material puede estar al servicio de las ideas. La moda es un medio que elijo, además de la música, para contar historias, para encarnarme, para transformarme, para iniciar un cambio o cerrar un ciclo, para inspirarme, para jugar…»
Aunque no son de la misma generación, Rosalía y Maria Grazia Chiuri tienen más de una cosa en común. Ambos aman el arte femenino. MGC rinde homenaje y colabora con mujeres artistas en cada colección (desde Niki de Saint Phalle hasta Eva Jospin) cuando la española se tatuó un liguero que sería una réplica del que llevaba la intérprete austriaca Valie Export durante una de sus creaciones escénicas. en los años 1970, símbolo de la cosificación de la mujer. “Es fundamental que mujeres artistas estén al frente de casas de moda icónicas, como es el caso de Maria Grazia en Dior. Ambas somos mujeres a cargo con una visión y luchando por ella. »