Posible ‘flujo inverso’ de migrantes tras la toma de posesión de Trump
El director del Servicio Nacional de Migración (SNM), Roger Mujica, ha expresado su preocupación ante la posibilidad de un «flujo inverso» de migrantes que podrían intentar regresar a sus países de origen una vez que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, tome posesión el 20 de enero. Según Mujica, la idea es que en el camino de regreso se tomen las medidas necesarias para que el impacto en los países de origen sea lo menor posible.
Respecto a las deportaciones realizadas mediante memorandos de entendimiento con Estados Unidos, Mujica aseguró que estas continuarán operando bajo los mismos lineamientos. Además, reveló que se ha aprobado una asignación adicional de recursos por parte del país norteamericano para sostener estas operaciones, aunque los detalles oficiales aún están pendientes de confirmación. Según Mujica, la cantidad asignada es similar a la actual y está destinada a mantener las actividades en curso.
Disminución en el flujo migratorio y tragedias en la región
A pesar de la disminución en el flujo migratorio en un 42%, la región continúa registrando tragedias. En 2024, se reportaron más de 50 muertes en el trayecto, incluidas algunas provocadas por accidentes naturales, como la caída de un árbol. Desde agosto pasado, se han realizado 39 vuelos de deportación, con 1,744 migrantes retornados a sus países de origen, quienes han cometido irregularidades migratorias en Panamá.
De acuerdo con las estadísticas del Servicio Nacional de Migración, este año han ingresado por la selva de Darién 300,819 migrantes irregulares. En comparación con el año 2023, la cifra anterior refleja una diferencia de 212,180 personas menos que han hecho la travesía desde Colombia. Además, se registraron 183 casos de menores de edad no acompañados que cruzaron el tapón del Darién, de los cuales 19 aún no han podido ser entregados a sus familiares.
La situación de los migrantes venezolanos y la suspensión de relaciones diplomáticas
La mayoría de los migrantes que están ingresando por Darién son venezolanos, pero debido a la suspensión de relaciones diplomáticas con ese país, Panamá permite que estos viajeros continúen su marcha hacia Centroamérica. Es crucial mantener un equilibrio entre la protección de los derechos de los migrantes y el cumplimiento de las leyes migratorias para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los involucrados.