Después de los llamamientos a un boicot lanzados tras las posiciones adoptadas por los franquiciados del grupo en todo el mundo sobre el conflicto en Oriente Medio, McDonald’s intenta apagar el fuego. En un mensaje publicado el martes por la noche, McDonald’s Francia intentó aclarar la posición de la dirección del grupo americano sobre este conflicto. La filial francesa de la marca de comida rápida, manifestándose «profundamente preocupada por la desinformación y las inexactitudes» sobre su posición, afirma que «la empresa McDonald’s no financia ni apoya a ningún gobierno implicado en este conflicto».
Añade que las iniciativas de sus franquiciados locales «fueron tomadas de forma independiente, sin el consentimiento ni la aprobación de McDonald’s». Una referencia al fuerte apoyo brindado por McDonald’s Israel al ejército del estado judío. «Desde el inicio de la guerra, McDonald’s Israel ha donado más de 100.000 comidas a las fuerzas de seguridad, a los residentes de los alrededores y a los hospitales, mientras que cinco de los restaurantes de la cadena han sido abiertos únicamente para este propósito», dijo la franquicia al gobierno local el 19 de octubre. añadiendo que concedía “una reducción del 50% a todas las fuerzas de seguridad y socorro”.
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En reacción a este apoyo declarado a las FDI, muchas franquicias del grupo estadounidense en el mundo árabe-musulmán se desvincularon rápidamente de la acción de McDonald’s Israel, hablando a favor de los palestinos. A continuación, las filiales de la marca en Turquía, Arabia Saudita, Qatar, Omán, Emiratos Árabes Unidos, Pakistán y Líbano anunciaron diversas acciones para apoyar a estas poblaciones.
Esta posición adoptada por la franquicia israelí del grupo también provocó llamamientos al boicot por parte de los internautas que se pusieron del lado de los palestinos. Y tuvo consecuencias incluso en los restaurantes franceses del grupo. “Boicotear a Israel”, “Palestina vivirá”, “aquí matamos a Gaza”… consignas hostiles al Estado judío fueron pintadas en seis McDonald’s de los suburbios de Lyon la noche del viernes 3 al sábado 4 de noviembre. Los restaurantes atacados también fueron objeto de lanzamientos de huevos y salpicaduras de pintura roja, dijo la prefectura del Ródano a Le Figaro.
En su mensaje publicado en X, McDonald’s Francia dice que piensa en las «comunidades y familias afectadas por esta crisis». “Aborrecemos todas las formas de violencia, nos oponemos firmemente al discurso de odio y siempre estaremos orgullosos de abrir nuestras puertas a todos”, afirma, indicando que la marca está haciendo todo lo que está a su alcance para “garantizar la seguridad de (sus) equipos en la región, al mismo tiempo que apoyamos a las comunidades en las que opera McDonald’s.
