El primer presidente del Tribunal de Cuentas, Pierre Moscovici, lanzó el viernes una nueva alerta sobre la deuda de Francia, agravada según él por las medidas de apoyo a los hogares y a las empresas durante la reciente crisis energética. «Estamos contra la pared», se preocupaba el ex Ministro de Finanzas, durante una rueda de prensa dedicada a las medidas excepcionales adoptadas por el Gobierno para proteger a los consumidores de la subida de los precios de la energía tras la ofensiva rusa contra Ucrania en 2022.
Escudo de precios de la electricidad y del gas, bonificación de los combustibles, controles excepcionales: “Hemos generalizado el sistema cueste lo que cueste, sin apuntar, hemos hecho más que nuestros vecinos y por tanto llegamos a una situación en la que ya no podemos endeudarnos ”, insistió Pierre Moscovici, tres días después de un primer disparo de advertencia en el informe público anual del Tribunal de Cuentas. “Se están acumulando gastos excepcionales en el sector energético (…) Si existen soluciones para hacer más eficiente la política energética pública, entonces hay que aprovecharlas. Debemos tomar el control de nuestras finanzas públicas”, abogó el primer presidente.
A diferencia de la pandemia de Covid, durante la cual el Tribunal consideró justificados los miles de millones de euros de gasto estatal, la inflación energética «no es un fenómeno existencial al que nunca nos hemos enfrentado», añadió. El «cueste lo que cueste» decidido por el Gobierno durante la crisis energética «podría ser reflexionado más que otros», consideró. «Aunque hemos validado plenamente (el apoyo público durante) el Covid, nos permitimos algunas reflexiones sobre la crisis energética y la inflación», concluyó Pierre Moscovici.
Desde la subida de los tipos de interés y en un momento en el que la deuda francesa supera el 111% del producto interior bruto (PIB), el ministro de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, ha anunciado en numerosas ocasiones el fin de «cueste lo que cueste». De este modo, el Gobierno ha eliminado más de 10.000 millones de euros de gastos energéticos entre 2023 y 2024, el escudo sobre los precios del gas desapareció en el verano de 2023 y el de los precios de la electricidad debe desaparecer a partir de ahora, aquí, a finales de año. En un informe publicado el viernes, el Tribunal de Cuentas cifra la factura neta de las medidas de apoyo al consumidor desplegadas por el Estado en 36.000 millones de euros entre 2021 y 2024.