Se trata de una medida que debería desencadenar el “rearme demográfico” deseado por Emmanuel Macron. En una entrevista concedida a la revista Elle, publicada el miércoles 8 de mayo, el Presidente de la República analizó más detalladamente el permiso por nacimiento que debe, a largo plazo, sustituir el permiso parental, considerado desigual por el Gobierno. Tendrá una duración de “tres meses para las mujeres, tres meses para los padres, acumulables durante el primer año del niño”, explicó el jefe de Estado.
En cuanto a la compensación, Matignon se mostró partidario en marzo de la opción de un sistema que ofrecería una compensación equivalente al 50% del salario del beneficiario. Emmanuel Macron confirmó esta cantidad “hasta el techo de la Seguridad Social” de 1.900 euros. «Los empleadores podrán complementar esta compensación y tener mejores prácticas», añadió el Jefe de Estado, esperando que la medida «empodere a los padres y permita una mayor igualdad entre los padres desde el nacimiento». “Este nuevo sistema, que se suma a los permisos de paternidad y maternidad, entrará en vigor a finales de 2025”, declaró también el presidente en las columnas de la revista.
Durante esta entrevista, Emmanuel Macron reafirmó su deseo de “generar una tasa de natalidad dinámica” prometiendo, en particular, mejorar el acceso a la procreación médicamente asistida (PMA). Para reducir los tiempos de espera, que actualmente oscilan entre 16 y 24 meses, Emmanuel Macron pretende “abrir a centros privados la autoconservación de óvulos” que estaba “hasta ahora reservada a los hospitales”. Finalmente, el presidente reveló la implementación de un “control de fertilidad” reembolsado por el Seguro de Salud alrededor de los 20 años, medida prometida en su “gran plan contra la infertilidad”.