François Hommeril, de 61 años, fue reelegido este miércoles al frente de la CFE-CGC, sindicato de ejecutivos, para un nuevo mandato de tres años, asegurando a los activistas que no había dicho «su última palabra». Este ingeniero químico, geólogo de formación, presidente de la CFE-CGC desde 2016, fue elegido junto al secretario general Jean-Philippe Tanghe y la nueva tesorera Farida Karad el primer día del Congreso.

De los 508 votos emitidos, el trío recibió 474 votos (25 blancos y 9 sin emitir), dando una puntuación del 93,31%. Esto es más que en 2019 (91,79% de los votos) y que en 2016 (90,83%). «¡No he dicho mi última palabra!», lanzó François Hommeril poco antes de las elecciones, destacando «un deseo insuperable de llevar durante tres años la ambición de la CFE-CGC de volverse aún más fuerte».

Después de criticar la entrevista de Emmanuel Macron con el número uno de la CGT, Philippe Martínez, juzgando que el jefe de Estado se había «ido a la luna», volvió a criticar la reforma de las pensiones como «la sobredosis de las llamadas reformas valientes». Señaló que desde el principio había «denunciado su motivación sospechosa y desequilibrada», «su argumentación precaria» y «la injusticia de su impacto».

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Y atacar a quienes “se instalan en todos los círculos del poder y distribuyen sus recetas firmadas por el doctor McKinsey a líderes en plena “mal travesía” ideológica. Como si nada hubiera cambiado en 40 años. En cuanto a la línea sindical, consideró que el término «reformista» ha sido «desvirtuado, vaciado de su sustancia progresista por decisores políticos con visión binaria para los que un sindicato está convocado a ser o un manifestante impenitente o un acompañante celoso». François Hommeril reivindica «una tercera vía: la de ser objetores decididos».

El Congreso continuará el jueves con una mañana de discusiones sobre temas socioeconómicos, así como la elección de secretarios nacionales y delegados nacionales del sindicato. Los delegados, incluido François Hommeril, tomarán un descanso al mediodía para manifestarse cerca del Palais des Congrès, como parte del noveno día de movilización intersindical. Fundada en 1944, la Confederación General de Ejecutivos (CGC), que se convirtió en CFE-CGC en 1981, es el cuarto sindicato más grande de Francia y cuenta con 160.000 miembros.