La RATP prevé contratar a 5.300 personas en 2024, anunció el martes su director general, Jean Castex, quien insistió en dos objetivos importantes: el éxito de los Juegos Olímpicos y la recuperación de la calidad del servicio en el transporte parisino. El año pasado, la RATP, ante importantes dificultades de servicio, presentó un programa de contratación aún más ambicioso de 6.600 personas. “Continuaremos este esfuerzo en 2024, obviamente en proporciones menores”, anunció el ex primer ministro, para quien una de las prioridades será “continuar la contratación en el metro”.
La RATP tiene previsto contratar 120 conductores y otros 200 para la movilidad interna, así como 1.350 conductores de autobuses. Las otras dos profesiones más buscadas son las de operadores de mantenimiento, con la ambición de atraer 350 reclutas, y agentes de estaciones, que serán cruciales en el sistema de organización de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos. Para este último, la RATP pretende contratar 900 reclutas, de los cuales 600 para los Juegos Olímpicos, un récord. «Es cierto que hemos ahorrado mucho en estos artículos y nos damos cuenta de que sin duda hemos ido demasiado lejos», admitió el director general.
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Este ambicioso plan de contratación lleva “el sistema de formación al máximo”, aseguró. Antes de añadir: “no pudimos contratar más”, indicando que la formación de conductores de metro se realizaba incluso de noche. En 2023, la RATP logró sus objetivos de contratación, lo que permitió mejorar significativamente el servicio en autobús y metro después de enormes dificultades a finales de 2022, sin alcanzar niveles satisfactorios, según Valérie Pécresse.
La présidente de l’autorité des transports Île-de-France Mobilités a demandé à la RATP de rétablir un service équivalent à l’avant-Covid pour mars, alors que cinq lignes du métro sont en-dessous des 85% de régularité aux heures de punta. Pero el objetivo parece difícil de alcanzar, según admite el propio Sr. Castex. En primer lugar, por el aumento de equipajes abandonados, lo que provoca numerosas interrupciones en el tráfico en toda la red.
Luego, “tenemos líneas que tienen equipos más obsoletos, más antiguos, en los que, por suerte, encontramos rendimientos inferiores”, subrayó. Saludó las compras de nuevos equipos decididas por el IDFM, pero esta decisión se tomó “con 20 años de retraso”. Y lo único que no sé hacer es retroceder en el tiempo”, afirmó el ex primer ministro.