Eran poco más de 15 millones el lunes por la noche, antes del discurso de Emmanuel Macron. Pero solo unos pocos estaban convencidos, como lo revela nuestra última encuesta de Odoxa-Backbone Consulting para Le Figaro. Una abrumadora mayoría de franceses (78%) considera incluso que el Jefe de Estado «se perdió» su intervención televisada. “Nunca Odoxa había registrado una puntuación tan baja”, destaca la directora del instituto, Céline Bracq. Durante su última entrevista, el 22 de marzo, en la que defendió su reforma de las pensiones, el jefe de Estado había logrado convencer al 23 % de los franceses, frente al 22 % al día siguiente de su discurso.
Durante sus trece minutos de intervención, Emmanuel Macron se dio «cien días» para actuar «al servicio de Francia», trazando su hoja de ruta en torno a tres proyectos prioritarios (trabajo, justicia y orden republicano, progreso). Una forma de que el Jefe de Estado abra una nueva secuencia. Pero la mayoría de los franceses (59%) todavía se niegan a pasar la página de las pensiones, creyendo que “no es el momento adecuado” para avanzar en otros temas. Sin embargo, el 39% desea «pasar a otra cosa» tras la promulgación de la reforma, el 15 de abril.
Para mantener su rumbo, Emmanuel Macron cuenta con un «apaciguamiento» del diálogo social, mientras persisten las tensiones con la intersindical. Sin querer «apurar» a los agentes sociales, el presidente les dio «hasta finales de este año» para construir «un nuevo pacto por la vida en el trabajo». Pero este método también es juzgado severamente por los franceses (62%), que incluso lo consideran poco realista (79%).
En este contexto, la relación de los franceses con el gobierno es negativa. Todos los ministros examinados por el instituto registran altos niveles de desconfianza, ya sea el Ministro de Trabajo, Olivier Dussopt (74%), el Ministro de Salud, François Braun (74%) o el Guardián de los Sellos, Eric Dupond-Moretti. (71%). Para estos últimos, ya comenzó la cuenta regresiva: deberán incorporar, hasta el 14 de julio, los tres proyectos prioritarios del Jefe de Estado.