Un metabolismo saludable le ayuda a perder peso y garantiza que tenga suficiente energía en la vida diaria. Sin embargo, algunas rutinas pueden ralentizar tu metabolismo y por tanto impedirte perder peso.

Quienes quieren perder peso suelen seguir muchas reglas: hacer ejercicio con regularidad, comer más sano y mantenerse alejado del alcohol. Pero no importa cuánto ejercicio haga o cuán saludable sea su vida, a veces perder peso no funciona. 

Probablemente te dijeron cuando eras niño que debías beber entre dos y tres litros de agua al día.  

Muy poca agua también ralentiza el metabolismo y dificulta la pérdida de peso. Por eso, bebe siempre mucho, porque agudiza tu mente y favorece la concentración.  

Un sueño insuficiente e irregular altera el metabolismo. Si duermes menos de cuatro horas por noche, tu metabolismo del azúcar se altera.  

Las personas que no duermen lo suficiente también comen alimentos ricos en calorías con más frecuencia. Un ritmo de sueño regular y una duración suficiente del sueño son los requisitos previos para un metabolismo que funcione de forma ideal.  

Los alimentos ricos en proteínas realmente estimulan el metabolismo porque el cuerpo tiene que utilizar mucha energía para descomponer las proteínas.  

Además, la proteína te mantiene lleno durante mucho tiempo y quema más calorías durante el procesamiento en el cuerpo que otros nutrientes. Sin embargo, la dieta no debe consistir exclusivamente en proteínas.  

Por supuesto, está claro que el ejercicio estimula el metabolismo. Sin embargo, si sólo practicas deportes de resistencia, entonces no estás aprovechando al máximo tu potencial. Por esta razón, debes hacer entrenamiento de fuerza con más frecuencia porque realmente acelera tu metabolismo.  

Si comes de forma irregular o incluso te saltas comidas, esto tiene un efecto negativo en tu metabolismo y lo ralentiza.  

Si crees que esto te ayudará a perder peso más rápido, estás equivocado. El cuerpo depende de un suministro regular de nutrientes. Si no obtiene suficiente, cambia al modo económico. Definitivamente deberías comer algo después de hacer ejercicio, ya que es la única forma de desarrollar masa muscular.  

El alcohol es un verdadero asesino de la figura y absolutamente prohibido a la hora de perder peso. La razón de esto es que después de consumir alcohol, la tarea principal del cuerpo es descomponer el alcohol.  

El metabolismo de los carbohidratos y las grasas se paraliza casi por completo. Esto ralentiza radicalmente el metabolismo y deja de quemar grasas.  

Es bien sabido que el azúcar no ayuda a la hora de perder peso. Los alimentos azucarados ralentizan el metabolismo y los niveles de azúcar en sangre aumentan rápidamente.  

Luego, el páncreas libera insulina, lo que garantiza que el azúcar de la sangre llegue a las células. Sin embargo, si el páncreas está sobrecargado, puede acabar habiendo muy poca azúcar en la sangre y provocar hipoglucemia.  

Esto suele ir seguido de antojos y, en el peor de los casos, puede provocar diabetes.  

El original de este artículo «¿No estás perdiendo peso? Siete factores inhiben tu metabolismo» proviene de FitForFun.