Los criadores pueden respirar tranquilos. El Parlamento Europeo y los Estados miembros anunciaron este miércoles haber llegado a un acuerdo para reducir las emisiones contaminantes de las actividades agrícolas e industriales en la UE, sin abordar, no obstante, las procedentes de la ganadería.
La Comisión Europea propuso en abril de 2022 endurecer su directiva sobre las “emisiones industriales”, que actualmente impone normas para la descarga de contaminantes nocivos (óxido de nitrógeno, metano, amoníaco) en 30.000 fábricas y 20.000 granjas porcinas y avícolas de gran tamaño a través de purines. ..). En particular, propuso ampliar su aplicación a la ganadería, que hasta ahora se había salvado, una señal de alerta para los sindicatos agrícolas que habían obtenido el mantenimiento de la exención. El texto aprobado el miércoles, tras meses de negociaciones, se referirá a instalaciones de cría de cerdos y aves de corral más intensivas gracias a la reducción de los umbrales. Las operaciones extensivas quedan excluidas del ámbito de aplicación. En cuanto a la industria, la directiva abarcará ahora también las actividades mineras: extracción y procesamiento de hierro, cobre, oro, níquel y platino. La directiva revisada “cubrirá 50.000 sitios en Europa, incluidos nuevos sectores como la minería. En lo que respecta a la agricultura, los cerdos y las aves de corral están incluidos y mejor cubiertos que hoy, mientras que la ganadería está excluida”, resumió Pascal Canfin (Renew, liberales), presidente de la comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo.
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Greenpeace denunció “una farsa”. «Los legisladores europeos han decidido eximir a las explotaciones industriales más contaminantes de las normas de la UE sobre contaminación industrial», reaccionó la ONG, subrayando que la inclusión de la ganadería sólo habría afectado al 1% de las explotaciones ganaderas de la UE. Adoptada por primera vez en 2010, esta directiva es el principal instrumento de la UE para reducir la contaminación procedente de grandes instalaciones industriales. Pretende luchar contra la contaminación del aire, del agua y del suelo, responsable de problemas de salud como el asma, la bronquitis y el cáncer. El acuerdo político alcanzado el miércoles aún tendrá que ser aprobado formalmente por el Parlamento Europeo y los estados miembros. El texto introduce el concepto de “valores límite de desempeño ambiental” que deben ser fijados por las autoridades competentes en el permiso que autoriza una instalación. Estos objetivos impulsarán a mejorar la eficiencia energética, reducir el consumo de agua y materiales, fomentando al mismo tiempo el uso de productos químicos menos tóxicos. Los infractores se enfrentarán a multas de al menos el 3% de su facturación anual en la UE para las infracciones más graves.
Para reducir la carga administrativa, los colegisladores acordaron la obligación de que los Estados miembros implementen permisos electrónicos para 2035. Para aumentar la transparencia, se debe crear un portal europeo sobre emisiones industriales. Los ciudadanos podrán encontrar datos relacionados con las emisiones contaminantes de los centros industriales.