(Ottawa) Un organismo de control federal dice que un alto funcionario de la Real Policía Montada de Canadá (RCMP) puso demasiado énfasis en una relación estratégica con una organización extranjera al decidir si compartir información representaba un riesgo de tortura.

El objetivo de la Ley para evitar la complicidad en malos tratos por parte de entidades extranjeras es prevenir la brutalización de una persona detenida en el extranjero a causa de información que Canadá intercambia con agencias extranjeras en el extranjero.

La RCMP y otras agencias federales sujetas a estas disposiciones deben evaluar el riesgo de maltrato y si dicho riesgo puede gestionarse.

En un informe publicado hoy, la Oficina de Revisión de Inteligencia y Seguridad Nacional (NSIRA) advierte enfáticamente contra la inclusión de otras consideraciones, como la promoción de relaciones estratégicas, en la evaluación de un riesgo significativo.

NSIRA recomendó que en los casos en que un comisionado adjunto de la RCMP no esté de acuerdo con la recomendación de un comité de no compartir información, el expediente se remita automáticamente al comisionado de la RCMP.