La Orden de Médicos criticó duramente este lunes el proyecto de la SNCF de instalar espacios de teleconsulta médica en sus estaciones y le aconsejó «mejorar el servicio ferroviario hacia los territorios más aislados» para atraer a los profesionales sanitarios. “La Orden de Médicos no puede más que expresar su profunda preocupación” por el plan de la SNCF de establecer espacios de teleconsulta en unas 300 estaciones, de aquí a 2028.
«Esta propuesta desviará a los profesionales sanitarios, que estarán así menos disponibles para ejercer en los territorios más vulnerables», predijo en particular la Orden de Médicos, que denuncia también un nuevo paso hacia la «financiarización» del sistema sanitario. La Orden «pide mucho más» a la SNCF que «mejore el servicio ferroviario hacia los territorios más aislados, un verdadero desafío para el atractivo de los territorios en lo que respecta a la instalación de profesionales sanitarios», añadió.
Lea también: Anne de Guigné: “RATP, SNCF… La neutralidad del género divide a las empresas”
La SNCF afirmó el viernes que quería desplegar espacios de telemedicina para combatir los desiertos médicos en unas 300 estaciones de aquí a 2028. Estos espacios de 15 metros cuadrados deberán instalarse inicialmente en edificios modulares proporcionados por Loxamed, filial del grupo Loxam (alquiler de equipos de construcción). . Para ello se han diseñado módulos especializados en atención, utilizados especialmente durante la crisis sanitaria para el cribado.
La SNCF indicó que siempre habrá una enfermera presente en el lugar y que cada paciente “será examinado a distancia por un médico que ejerce en territorio francés”. Loxamed planea contactar a los sindicatos regionales de profesionales de la salud (URPS) para encontrar enfermeras y médicos privados que brinden teleconsultas.
El sindicato de médicos UFML (Unión Francesa para la Medicina Gratuita) también denunció duramente la iniciativa de la SNCF y de Loxamed, considerándola un nuevo ejemplo de desarrollo de “medicamentos muy lucrativos y de bajo coste” para las empresas. “No puede haber un buen medicamento elaborado a partir del consumo pulsador y a distancia de un médico que no conoce al paciente”, criticó el sindicato.