El mal tiempo perturbó el pasado domingo la salida de la Transat Jacques Vabre. Si los multicascos gigantes de la clase Ultim consiguieron tomar el camino del Canal de la Mancha antes de caer al Atlántico mientras vencían la tormenta Ciaran, el Ocean Fifty y los barcos de la Clase 40 se vieron obligados a buscar refugio en el puerto de Lorient cuarenta -ocho horas después de salir de Le Havre el pasado domingo.

Los Imoca, los monocascos de la Vendée Globe, permanecieron en Normandía porque ningún puerto bretón podía acoger a las cuarenta tripulaciones.

Esta espera pronto no será más que un mal recuerdo. El Ocean Fifty y el Class 40 podrán zarpar el lunes a las 10:30 horas para el primero y un cuarto de hora más tarde para los demás. Los IMOCA finalmente zarparán el martes desde Le Havre, anunció la organización de la regata el sábado por la mañana.

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