Rusia volvió a atacar la región de Odesa, en el sur de Ucrania, con 19 drones y 14 misiles, y las autoridades informaron este lunes 25 de septiembre de un herido y daños en la infraestructura portuaria. Moscú «atacó la región de Odessa con drones ofensivos y dos tipos de misiles», detalló el gobernador Oleg Kiper en Telegram, mencionando varios «ataques», incluido el ataque a la «infraestructura portuaria». «Un civil resultó herido por una onda expansiva», añadió Oleg Kiper, precisando que la víctima fue trasladada al hospital.
Según el ejército ucraniano, Rusia llevó a cabo el asalto con 19 drones Shahed de fabricación iraní, dos misiles supersónicos Onyx y otros 12 misiles Kalibr. También se movilizó un submarino, afirmó la misma fuente. Todos los drones y 11 Kalibr fueron derribados por las defensas aéreas, prosiguió el ejército, indicando que la ciudad balnearia de Odesa había sufrido daños «importantes».
Dos de los 11 misiles Kalibr destruidos estaban en las regiones de Mykolaiv (sur) y Kirovograd (centro), y la «gran mayoría» encima de Odessa, dijo el ejército. Un proyectil Onyx impactó en un almacén de cereales «vacío» en el puerto de Odessa, afirmó Natalya Gumenyuk, portavoz del ejército, afirmando que la estación balnearia está «realmente destruida». El ejército también informó de almacenes y negocios dañados por la caída de escombros en los suburbios de la ciudad.
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Las fuerzas rusas atacan periódicamente esta región del sur de Ucrania con vistas al Mar Negro, donde se encuentra una infraestructura portuaria crucial para el comercio marítimo. Los ataques han aumentado desde el abandono en julio del acuerdo sobre cereales que permitía a Ucrania exportar libremente su producción.
El domingo, sin embargo, un segundo cargamento de trigo ucraniano llegó a Estambul a través del Mar Negro utilizando un corredor marítimo establecido por Kiev a pesar de las amenazas de Moscú de atacar los barcos que entran y salen de Ucrania.
En Rusia, el distrito de Kursk, en el suroeste del país, fue blanco de drones ucranianos, informó en Telegram el gobernador regional Roman Starovoyt. «No hay víctimas», pero un edificio administrativo sufrió daños, señaló, asegurando que la «defensa aérea funcionó».
En la vecina región de Bryansk, justo al norte, el gobernador Alexandre Bogomaz contabilizó tres drones aéreos ucranianos derribados, dos de ellos en el distrito de Souraj (oeste), sin informar de víctimas ni daños.