Unas decenas de activistas del partido independentista corso Core in Fronte se reunieron el domingo en la carretera que conduce a la villa del primer ministro Gabriel Attal en Coti Chiavari (Córcega del Sur), en medio de un control de la gendarmería, constató un periodista de la AFP.
A pesar de la prohibición de esta manifestación por parte de la prefectura, los activistas de Core in Fronte, partido minoritario en la Asamblea de Córcega, desplegaron, durante aproximadamente una hora y en un ambiente tranquilo, banderas corsas, con la cabeza de un moro negro sobre fondo blanco, como así como pancartas que decían “Basta represión” y “gendarmes, foros SDAT (subdivisión antiterrorista)” (afuera en corso).
Seis manifestantes también intentaron desembarcar cerca de la villa, a bordo de una embarcación semirrígida, pero las autoridades se lo impidieron en el mar.
«No estamos aquí para llevar a cabo un allanamiento de morada», destacó en un discurso Paul-Félix Benedetti, jefe de Core in Fronte, «sino que estamos aquí para transmitir un mensaje político claro». “Estamos negociando una solución para poner fin al conflicto y de manera furtiva y dañina se está utilizando una lógica represiva. Esto no augura nada bueno para una discusión pacífica. Hoy, atacar a activistas es un ataque directo”, dijo a la AFP Paul-Félix Benedetti. «Si los funcionarios del Estado aman a Córcega, que empiecen a respetar a los corsos», añadió.
Para denunciar la detención del activista independentista Stéphane Ori, acusado y encarcelado a finales de marzo en el marco de una investigación judicial abierta por la fiscalía nacional antiterrorista, Core in Fronte convocó el miércoles a celebrar esta concentración el domingo a las 2 :30 p.m. «frente a la casa de Gabriel Attal. Los manifestantes exigieron la “liberación inmediata” de Stéphane Ori.
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El viernes, la prefectura prohibió esta manifestación «no declarada» y el domingo los gendarmes bloquearon la carretera que conduce a la villa de Gabriel Attal. Las autoridades dijeron que temían que «individuos radicales» «aprovechen esta convocatoria, que actualmente circula en las redes sociales, para alterar el orden público».
El 3 de febrero, militantes independentistas del mismo partido irrumpieron en la casa del ministro de Justicia, Éric Dupond-Moretti, en el pueblo de Centuri, en Cap Corse (Alta Córcega). Se abrió una investigación por allanamiento de morada y daño agravado. Los activistas reivindicaron una “operación simbólica y política” dirigida a la “secundaria residencia” del ministro, para “denunciar los mecanismos represivos en Córcega”.