Francia expresó el martes 14 de mayo «su preocupación tras la detención de la abogada y periodista Sonia Dahmani», acusada, según los medios tunecinos, de haber difundido «informaciones falsas con el objetivo de perjudicar la seguridad pública». La detención se produjo «en el contexto de otras detenciones y detenciones, en particular de periodistas y miembros de asociaciones», afirmó Christophe Lemoine, portavoz adjunto del Ministerio francés de Asuntos Exteriores.

Las fuerzas de seguridad tunecinas irrumpieron en la Casa del Abogado en Túnez el sábado por la tarde y arrestaron a Sonia Dahmani, abogada y columnista, después de hacer comentarios sarcásticos sobre la situación en el país. La escena fue filmada por France 24, que se vio obligada a suspender sus retransmisiones en directo. «La libertad de expresión y la libertad de asociación, al igual que la independencia de la justicia y el derecho de defensa, son principios garantizados por la Constitución tunecina así como por los convenios de las Naciones Unidas que tanto Túnez como Francia han suscrito», recuerda el portavoz de la Muelle de Orsay.

Desde que el presidente Kais Saied, elegido democráticamente en octubre de 2019 para cinco años, se concedió plenos poderes durante un golpe de Estado en julio de 2021, las ONG tunecinas e internacionales han deplorado una regresión de los derechos en Túnez. Según el Sindicato Nacional de Periodistas, en un año y medio, más de 60 personas, entre periodistas, abogados y opositores al presidente, han sido procesadas sobre la base de un decreto promulgado en septiembre de 2022. Este último castiga con hasta cinco años de prisión. en prisión quien utilice las redes de información y comunicación para “escribir, producir, difundir (o) difundir noticias falsas (…) con el objetivo de vulnerar los derechos de otros o perjudicar la seguridad pública.

La semana pasada, durante un programa de televisión, Sonia Dahmani lanzó irónicamente «¿de qué país extraordinario estamos hablando?», en respuesta a otro columnista que acababa de afirmar que inmigrantes de varios países del África subsahariana buscaban establecerse en Túnez. Esta afirmación fue juzgada por algunos usuarios de las redes sociales como “degradante” para la imagen de Túnez.

Dos columnistas de radio y televisión conocidos en Túnez también fueron detenidos el domingo por criticar la situación del país, un día después de la dura detención de Sonia Dahmani por motivos similares. La Unión Europea expresó el martes su «preocupación» por estas detenciones de figuras de la sociedad civil en Túnez, subrayando que la libertad de expresión y la independencia del poder judicial constituyen «la base» de su asociación con Túnez.

«La delegación de la UE pidió a las autoridades tunecinas a nivel local aclaraciones sobre los motivos de estas detenciones», afirmó la portavoz de la diplomacia europea, Nabila Massrali.