Una vez más la estratosférica remuneración de Carlos Tavares, el jefe de Stellantis, alimentará las conversaciones. El jefe del grupo nacido de la fusión de PSA y Fiat Chrysler debería ver su remuneración aumentar un 56% este año gracias a una bonificación de 10 millones de euros. De hecho, el consejo de administración acaba de recompensarle por haber conseguido hacer del grupo un “proveedor de movilidad tecnológica sostenible”. Los emolumentos del jefe de Stellantis podrían alcanzar en última instancia los 36,5 millones de euros para el año 2023, un aumento del 56% en un año.

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El grupo pone en perspectiva la importancia de este aumento: la retribución básica del “jefe” para 2023 se mantiene en 2 millones de euros, sin cambios desde hace 3 años. “Su importe fijo sumado al variable asciende a 13,5 millones de euros”, o 1,4 millones de euros menos que en 2022”.

Finalmente, al mismo tiempo, se han concedido y registrado incentivos a largo plazo por un importe de 13 millones de euros, pero se abonarán en función de posibles logros futuros.

Carlos Tavares lidera, es cierto, uno de los grupos más rentables del mundo. Stellantis ocupa el puesto 16 en el mundo. Su margen operativo en 2023 alcanzó el 12,8% de la facturación, una excepción en el mundo de la automoción.