El líder encarcelado del partido de oposición tunecino Ennahdha, Rached Ghannouchi, inició una huelga de hambre el lunes 19 de febrero para protestar contra la detención de opositores en Túnez y para expresarles su apoyo, anunció su movimiento islamo-conservador.

Detenido desde el 17 de abril de 2023, Rached Ghannouchi, de 82 años, “decidió iniciar una huelga de hambre (…) en solidaridad con los (otros) presos en huelga de hambre y para apoyar a todos los opositores (encarcelados) en las distintas prisiones” de el país, afirmó su partido en un comunicado de prensa.

Varias figuras políticas encarceladas, entre ellas Jawhar Ben Mbarek e Issam Chebbi, líderes del Frente de Salvación Nacional (FSN), la principal coalición de oposición, llevan ocho días en huelga de hambre para exigir su liberación.

Denunciando “procesamientos arbitrarios infundados” y el deseo de los gobernantes de excluir a sus opositores de la escena política, estas personalidades ya habían liderado una huelga de hambre durante varios días en septiembre. La mayoría de los opositores encarcelados están siendo procesados ​​por “conspiración contra la seguridad del Estado”.

A principios de febrero, Rached Ghannouchi, la bestia negra del presidente Kaïs Saïed, fue condenado a tres años de prisión por financiación ilegal “extranjera” de su formación. El 15 de mayo de 2023 ya había recibido un año de prisión por “apología del terrorismo” en el contexto de otro caso, sentencia endurecida a 15 meses en apelación el pasado octubre.

Este veredicto se pronunció a raíz de una denuncia de un sindicato de policía que denunciaba unas declaraciones que había hecho a principios de 2022 durante el funeral de un funcionario de Ennahdha al que había asegurado que “no temía ni a los poderosos ni a los tiranos”, palabra que designa a la policía, según al expediente de la Fiscalía.

Rached Ghannouchi, cuyo partido dominó gobiernos durante la última década después de la revuelta de 2011 que derrocó la dictadura de Zine El Abidine Ben Ali, es el opositor más famoso encarcelado desde que el presidente Saied asumió plenos poderes en julio de 2021. Desde febrero de 2023, más de veinte Opositores, empresarios y otras personalidades, calificados de “terroristas” por Kaïs Saïed, han sido encarcelados acusados ​​de “conspiración contra la seguridad interior”.