El ministro de Transición Ecológica, Christophe Béchu, pidió el jueves al presidente del consejo departamental de Alto Marne que considere «alternativas» a un proyecto de tala de árboles impugnado, por temor a un «ataque a la biodiversidad». «El imperativo de seguridad vial, que suscribo, no puede ser el pretexto para tal ataque a la biodiversidad, aunque se puedan considerar alternativas», escribió Béchu a Nicolas Lacroix, presidente del departamento de LR, en una carta consultada por AFP.

Lacroix anunció la semana pasada que se examinarían 4.000 árboles con vistas a una posible tala, lo que provocó la protesta de varias asociaciones. Sólo se talarán árboles enfermos o peligrosos, una decisión que se tomará «árbol por árbol», explicó a la AFP. “En algunos lugares no hay el ancho de un espejo retrovisor entre la carretera y el árbol”, aseguró el martes. Además, algunos árboles han crecido tanto que también provocan fuertes deformaciones en la calzada, afirmó.

«No son los árboles los que provocan los accidentes de tráfico», subraya Christophe Béchu a la AFP, afirmando «(comprender) el asombro de las asociaciones y de las ONG». El ministro recuerda en su carta que el código medioambiental prohíbe “talar o dañar un árbol (…) o modificar radicalmente el aspecto de uno o varios árboles en un camino o ‘una alineación’. Sin embargo, hay excepciones, en particular cuando “el estado sanitario o mecánico del árbol(s) presenta un peligro para la seguridad de las personas”, está escrito en el código medioambiental. Pero esto requiere una declaración previa a la prefectura, pero «hasta la fecha no se ha registrado ninguna remisión» por parte de la prefectura, asegura el ministro.