El fabricante de automóviles alemán BMW presentó el sábado su proyecto «Neue Klasse», para responder a la competencia de Tesla y de los fabricantes asiáticos, muy avanzados en materia eléctrica, en vísperas de la inauguración del Salón del Automóvil de Múnich el lunes. Anunciada en 2021, la Neue Klasse (Nueva Clase) designa tanto la generación de un conjunto de vehículos nuevos como la arquitectura eléctrica sobre la que se construirán los vehículos, a partir de 2025.
Representa «un 30% más de autonomía, un 30% más de velocidad de carga, un 25% más de eficiencia», aseguró en un comunicado uno de los líderes del grupo, Frank Weber. Esta nueva arquitectura, sobre la que el grupo quiere construir más de la mitad de los modelos vendidos hasta finales de la década, debería permitir sobre todo a BMW aumentar sus márgenes y seguir siendo competitivo en un entorno cada vez más competitivo.
Leer tambiénCoches eléctricos: ¿Ganará China en Europa?
En julio, el BMW I3 fue sólo el décimo coche eléctrico más vendido en Alemania, muy por detrás de los modelos de Tesla y Volkswagen, según cálculos del Centro de Gestión del Automóvil (CAM). BMW es uno de los pocos fabricantes del sector de la automoción que no se ha fijado un plazo para el fin de los motores de combustión y que apuesta por el hidrógeno mientras sigue trabajando en los motores tradicionales, mientras las carreteras de la Unión Europea se preparan para una movilidad libre de carbono para 2035.
En este contexto, la Neue Klasse debe ser una respuesta al éxito de Tesla y de sus competidores asiáticos, especialmente chinos, cuya presencia sin precedentes en el salón de Munich demuestra el deseo de conquistar el mercado europeo en el segmento eléctrico. BMW “no llega tarde”, pero debe “ser bueno, porque este terreno de juego no está vacío y a punto de llenarse mucho más a partir de 2024”, resume Matthias Schmidt, experto del sector.