Francia responderá «inmediata e intratablemente» en caso de ataque a sus nacionales, reaccionó el Elíseo, tras las manifestaciones del domingo por la mañana frente a la embajada francesa en Niamey. El presidente de la República «no tolerará ningún ataque contra Francia y sus intereses», dijo el Elíseo, asegurando apoyar «todas las iniciativas regionales» para restaurar el orden y el regreso de Bazoum.

Miles de personas se manifestaron frente a la embajada francesa en Niamey antes de ser dispersadas por bombas lacrimógenas. Algunos manifestantes querían entrar al edificio, otros derribaron la placa que decía «Embajada de Francia en Níger», antes de pisotearla en la pista y reemplazarla con banderas rusas y nigerinas.

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La manifestación comenzó con una marcha hacia la Asamblea Nacional, la multitud ondeaba banderas rusas y nigerianas. El movimiento civil M62, que ya había protestado contra la operación Barkhane del ejército francés en el Sahel y el Sáhara, convocó manifestaciones. Los periodistas franceses presentes en el lugar fueron reprendidos. Como recordatorio, entre 500 y 600 ciudadanos franceses se encuentran actualmente en Níger, según el Quai d’Orsay.

«Francia también apoya todas las iniciativas regionales» destinadas a «restablecer el orden constitucional» y el regreso del presidente electo Mohamed Bazoum, agregó la presidencia francesa. Los países de África occidental se reúnen este domingo en Abuja para una «cumbre extraordinaria» para evaluar la situación tras el golpe militar con probables sanciones, que la junta ve como una amenaza de «intervención militar inminente».

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Francia, aliado de Níger para la lucha contra el yihadismo y el desarrollo, y que cuenta allí con 1.500 soldados, anunció el sábado que suspendía su ayuda tras el golpe militar. Después de Malí y Burkina Faso, Níger, asolado por ataques de grupos vinculados al Estado Islámico y Al-Qaeda, es el tercer país de la región en sufrir un golpe de estado desde 2020.