Reino Unido vive desde este jueves nuevas huelgas que afectan tanto a los hospitales, donde los médicos especialistas dejarán de trabajar por primera vez en diez años, como a las estaciones, donde los maquinistas se irán. El país, que se enfrenta a una grave crisis del coste de la vida, se ve afectado desde hace meses por huelgas en los sectores de la sanidad, el transporte, la educación, correos… Los empleados piden aumentos, ante una inflación que desciende pero sigue siendo la más alta de los países del G7, con un 7,9% en junio.
Después de las enfermeras, los paramédicos, los «médicos junior» que son el equivalente a los internos, les toca el turno a los «consultants», los médicos más experimentados, que dejan de trabajar en los hospitales ingleses. Comienzan el jueves a las 7 de la mañana (6:00 GMT) un paro de 48 horas. Los dentistas de hospitales también se están uniendo al movimiento. El servicio de salud pública, el NHS, está al límite. Tras años de tratamiento de austeridad y la pandemia de la Covid-19, el acceso a la atención es cada vez más complicado. Los niños tienen que esperar hasta 18 meses para recibir tratamientos dentales que requieran anestesia, incluidas las extracciones dentales, según una investigación de la BBC publicada el miércoles.
Leer tambiénEn Reino Unido, un sector sanitario sin aliento
La huelga de cinco días, hasta el martes pasado, de los “médicos juniors” provocó el aplazamiento de decenas de miles de citas. La de los especialistas podría causar aún más interrupciones, advirtió el NHS. En ocho meses de huelgas, más de 600.000 citas médicas se han visto afectadas en total, según el director médico del NHS, Stephen Powis. “Cada vez es más difícil volver a encarrilar los servicios después de cada huelga”, lamentó. El gobierno ha propuesto un aumento del 6% para este año para los médicos especialistas. Pero según el sindicato BMA (British Medical Association), esta propuesta corresponde a una reducción de los salarios en términos reales.
“Mi puerta siempre está abierta para discutir temas no salariales, pero esta propuesta es definitiva y, por lo tanto, pido a la BMA que ponga fin a sus huelgas de inmediato”, dijo el ministro de Salud, Steve Barclay, en un comunicado. El 13 de julio, el primer ministro conservador Rishi Sunak instó a los sindicatos de la función pública a poner fin a las huelgas y aceptar la última oferta de aumento salarial del gobierno del 5 % al 7 %, según el sector. Los docentes han anunciado así la suspensión de su movimiento tras una oferta del 6,5%.
Los maquinistas del sindicato RMT, que han estado en huelga durante un año, también se retirarán cuando comiencen las vacaciones escolares. Los servicios ferroviarios advirtieron que el jueves, luego el 22 de julio y el 29 de julio habría “poco o ningún servicio en gran parte de la red”. El sindicato Aslef inició una huelga el 17 de julio, que debería terminar el sábado.