El 2 de julio celebró su 95 cumpleaños en compañía de François Hollande, Florent Pagny y Dany Boon. Line Renaud está en plena forma ya que acaba de terminar el rodaje de una película de ficción sobre el tema del final de la vida, Le Prochain Voyage, con el actor Jean Sorel. La idea de la muerte parece rondarla desde que con nuestros compañeros de Gala volvió a la evocación de sus últimos días.

Esta mujer enérgica, que durante muchos años fue la abanderada en la lucha contra el SIDA, desea partir hacia la eternidad de la manera más pacífica posible, cerca de sus seres queridos: «Estaré en la Jonchère, en mi cama con mi perro Pirata a mi lado, si es que sigue vivo. Lo acariciaré, le pediré que se acerque a mí y él se acercará. Estaré rodeado de todos mis parientes con quienes hablaré. Todo debe ser feliz. Quiero dejar una imagen relajante. Mis amigos quieren que me vaya sin sufrir. Y se decide sin ley moriré en resistente.

Leer tambiénLine Renaud y Jean Sorel, de la mano para su Next Trip

Este triste momento para sus admiradores y para sus amigos lo prepara Line Renaud y no teme hablar de ello públicamente. Incluso afirma sin extenderse que pensó en su funeral: “Todo está listo, nadie tendrá que cuidarlo”.

Mientras espera este doloroso momento, Line Renaud sigue viviendo con la alegría de vivir que conocemos. Nunca renunció a la coquetería. En una salida sin hipocresía, confesó que había recurrido a la cirugía estética: “Tenía los párpados caídos, un poco como los de François Hollande. En los camerinos del Casino de París ya no podía maquillarme los ojos. Línea Sagrada Renaud, 95 años con flores y aún con esa pizca de locura y fantasía.