Enviado especial a Bayona
¿Merecía Jasper Philipsen (Alpecin-Deceuninck) verse privado de su tercera victoria en el Tour de Francia tras ganar el sprint por las calles de Bayona el lunes? Los comisarios contemplaron largo rato las imágenes de su duelo ante Wout Van Aert, pegados a las barreras y obligados a soltar su esfuerzo a unas decenas de metros de la meta. Una decisión justificada porque Philipsen nunca tuvo la intención de poner en peligro a Van Aert sino que cuestiona el arriesgado recorrido del sprint.
Su éxito pendió de un hilo durante varios minutos y vimos al belga repasar, preocupado, la acción en compañía de Tadej Pogacar, antes de recibir la autorización para subir al podio ceremonial tras la validación de su victoria.
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“Rápidamente me di cuenta de que había habido un incidente, pero sabía que el lado derecho de la carretera era la ruta más corta hacia la línea de meta. Cuando estás a la cabeza, tienes que tomar la ruta más corta. La brecha fue pequeña y no creo que haya sido injusto con nadie. Lo cierto es que si la meta hubiera sido recta, el sprint no habría dado lugar a ninguna discusión”, confiesa el belga que toca el quid del problema: la presencia de una curva justo antes de la “llegada”.
Philipsen, en cabeza, tomó la tangente, inclinándose a la derecha sin cambiar bruscamente de rumbo (ni forzar el paso con los codos). Encerrado en barreras (que pueden haber sido desplazadas por la presión de los espectadores), Van Aert, quizás asustado por la proximidad de las barandillas, soltó su esfuerzo con cautela después de darse cuenta de que no tenía ninguna posibilidad de pasar por una ratonera. Una sabia decisión.
“No me corresponde a mí responder sobre este tema sino a la organización. Los accidentes también ocurren en las rectas”, explicó el ganador de la jornada cuando le preguntaron por la curva final en pleno sprint. Los dos hombres podrían tener una nueva oportunidad de brillar en un cara a cara ya que la etapa del martes, entre Dax y Nogaro, con meta en el circuito de carreras, estará cortada para velocistas. Pero en línea recta esta vez.
