“Inteligencia artificial”: casi ningún otro término ha tenido un impacto tan duradero en el mundo empresarial como este. Desde la introducción del chatbot Chat GPT, una tecnología en particular ha llamado la atención: la IA. Su potencial, especialmente en áreas con uso intensivo de datos, está provocando una revolución en una amplia gama de industrias.

En medicina, un campo caracterizado por una cantidad casi infinita de datos, el uso de la IA promete cambios revolucionarios. Síntomas de los pacientes, valores sanguíneos, ciclos de tratamiento y resultados de estudios clínicos: la lista es larga y la cantidad de datos enorme. Los médicos ya están utilizando software basado en inteligencia artificial para obtener información valiosa a partir de esta avalancha de datos y mejorar la atención al paciente.

Para la mayoría de los pacientes, el uso de la IA pasa desapercibido, pero la tecnología ya proporciona valiosos servicios en segundo plano. Según las opiniones de los expertos, el mercado de productos de diagnóstico médico basados ​​en IA crecerá enormemente en los próximos años. Un estudio de Research Nester predice un crecimiento anual de un impresionante 45 por ciento hasta 2030.

No sólo empresas establecidas como Siemens forman parte de esta tendencia, sino también, cada vez más, startups que proponen soluciones innovadoras. Todos se esfuerzan por implantar sus productos de IA en el mercado y contribuir a mejorar la atención médica.