El miércoles 22 de noviembre se celebra en la República del Congo una jornada de luto nacional decretada por las autoridades congoleñas, en memoria de los 31 jóvenes que murieron en una estampida el lunes por la tarde en Brazzaville durante una operación de reclutamiento del ejército.
Las banderas están a media asta en la capital, frente a las administraciones públicas y las escuelas, constató un corresponsal de la AFP. Los bares y otros lugares de entretenimiento también observan luto nacional. En la ciudad, sin embargo, el tráfico rodado era normal.
El martes por la tarde, el portavoz del gobierno congoleño, Thierry Moungalla, anunció que 31 personas habían muerto y otras 145 habían resultado heridas en la estampida que se produjo durante la noche del lunes al martes en el estadio Michel d’Ornano de Brazzaville. Según los agentes responsables de la seguridad del lugar, había varios miles de jóvenes candidatos para el reclutamiento. Algunos forzaron la puerta, otros saltaron un muro.
El 14 de noviembre se lanzaron operaciones de reclutamiento en el ejército congoleño y “nuestros jóvenes respondieron masivamente al llamado del deber queriendo servir bajo la bandera”, recordó Moungalla, que también es Ministro de Comunicación. El gobierno “declaró día de duelo nacional este miércoles con izado de bandera a media asta, cierre de bares, salones de baile, establecimientos de bebidas y lugares festivos”, detalló.
Además de la investigación judicial abierta por el fiscal, se abrió una “investigación administrativa mixta –policía, fuerzas armadas congoleñas–. Tendrá que determinar las causas de la tragedia y presentar sus conclusiones en los próximos días”, indicó también Moungalla. Organizaciones congoleñas de derechos humanos y representantes políticos de la oposición han señalado la responsabilidad del gobierno en esta tragedia.
El martes, la organización “Debout pour le Congo” (DPC) pidió al gobierno que pusiera en marcha un “plan para combatir el desempleo juvenil masivo”. El Congo, un pequeño país de África Central, tiene 5,7 millones de habitantes, el 47% de los cuales son menores de 18 años, según el informe del Banco Mundial de 2022. En este país rico en petróleo, dirigido por Denis Sassou Nguesso, de 79 años, 39 de los cuales han sido jefe de Estado, “el 42% de los jóvenes están desempleados”, recuerda DPC, citando un informe del Banco Mundial.