(Washington) El fiscal general de Joe Biden, Merrick Garland, fue sancionado el miércoles por los republicanos de la Cámara de Representantes por negarse a cooperar en una investigación contra el presidente demócrata.
Los cargos electos conservadores exigen desde hace semanas grabaciones de audio de un testimonio del líder estadounidense ante un fiscal especial, que su secretaria se niega a facilitarles.
Esta declaración tuvo lugar como parte de un caso relacionado con la retención de documentos confidenciales por parte de Joe Biden.
En su informe, el fiscal especial a cargo de la investigación recomendó finalmente que se desestimara el caso del presidente, pero hizo comentarios controvertidos sobre su, a veces, mala memoria.
En pleno año electoral, el campo demócrata denunció comentarios “gratuitos” con “motivaciones políticas”, pero sus oponentes republicanos explotaron inmediatamente el informe para considerar que Joe Biden era “no apto” para ejercer sus funciones.
Desde entonces, dos comités de la Cámara controlados por los republicanos han exigido que se les proporcione la grabación, no sólo las transcripciones.
Garland justificó su negativa a entregar estas grabaciones por la necesidad de garantizar la cooperación de altos funcionarios ejecutivos en futuras investigaciones similares.
La sanción impuesta el jueves a Merrick Garland, acusado de «intentar obstruir una investigación del Congreso», es principalmente simbólica.