(Québec) Henri-Paul Rousseau, empresario y ex director de la Caja de depósito y colocación de Québec (CDPQ), ha sido nombrado delegado general de Quebec en París.
El Consejo de Ministros aprobó el miércoles por la tarde el nombramiento de Rousseau, que sucede a otra ex miembro del CDPQ, Michèle Boisvert.
La ministra de Relaciones Internacionales, Martine Biron, lo anunció tras la reunión del Consejo de Ministros y rindió homenaje a Boisvert, que ocupó el cargo durante cinco años en la capital francesa. Le atribuyó en particular el éxito de la visita del primer ministro francés, Gabriel Attal, en primavera.
Rousseau asumirá su cargo a mediados de julio.
Según Biron, el próximo delegado general tiene “muchos contactos políticos” en Francia y contribuirá a la misión del gobierno de acercarse económicamente al “primo francés”.
Henri-Paul Rousseau, de 76 años, comenzó su carrera en el mundo académico antes de asumir varios puestos directivos en instituciones financieras.
Trabajó en el Banco Nacional en la década de 1980, antes de convertirse en presidente y director ejecutivo del Laurentian Bank of Canada. Fue en 2002 cuando tomó las riendas de la Caja de depósito y colocación, hasta 2008.
Su largo reinado, sin embargo, se vio ensombrecido por el episodio del papel comercial, que provocó que los quebequenses perdieran miles de millones de dólares en 2008. Ese año, la Caisse reveló una pérdida de casi 40 mil millones.
Rousseau tuvo que dar explicaciones ante funcionarios electos en un comité parlamentario en 2009 y expresó su pesar.
“Los documentos comerciales son un error. Como si vas en bicicleta, no mires hacia adelante y te choques contra la pared… eso es un error”, dijo en ese momento.