El Girondins de Bordeaux denunció este sábado los insultos racistas proferidos en las redes sociales contra su defensa camerunés Malcom Bokele, excluido ante el Bastia (2-0) durante un tormentoso final de la 30ª jornada de la Ligue 2.
“Sean cuales sean las situaciones de juego vividas en el campo, nada puede justificar ni justificará nunca el racismo en el fútbol. Al enterarse de los hechos que ocurrieron después de la reunión, el Burdeos brinda todo su apoyo a Malcom Bokele frente a los comentarios e insultos en su contra”, escribió el director general adjunto, Thomas Jacquemier.
Los girondinos, «firmemente comprometidos con esta lucha contra el racismo y todas las formas de discriminación», indicaron que estudian «posibles acciones judiciales para que los hechos ocurridos hoy no queden en la impunidad».
La nota de prensa no da otros detalles pero, cuestionado por AFP, el club indicó que se trata de insultos proferidos en las redes sociales, tras un final de partido tormentoso marcado por un rifirrafe tras un encontronazo entre Bokele y el extremo de Bastian Migouel Alfarela.
Esto fue seguido por una patada del centrocampista de Bastia Tom Ducrocq en el pecho de Bokele y luego en el suelo, luego una intrusión en el campo de suplentes y técnicos de ambos lados que se criticaron entre sí.
Tras varios minutos de tensión, el árbitro M. Brizard expulsó a los dos primeros protagonistas del incidente, Bokele y Alfarela, para disgusto del técnico del Girondin, David Guion, que habló de “una expulsión injustificada”. “Ahí están las fotos. Inmediatamente, le dije al club que tenían que apelar porque en ningún caso Malcom (Bokele) hizo un gesto de agresión hacia su oponente.
Poco después del partido, varios tuits y mensajes con connotaciones ofensivas y racistas apuntaron al defensa del Burdeos, quien por su parte se expresó en Instagram: “Obviamente estoy muy decepcionado con este final de partido, especialmente en estas condiciones. Pero el apoyo que he recibido desde la filmación del incidente va directo a mi corazón».
Al término de esta 30ª jornada de L2, el Burdeos consolidaba su plaza de 2º a cinco puntos de Le Havre, pero ahora cuatro puntos por delante de Sochaux y Metz, a donde irá en una semana.