Le Figaro Nantes
A principios de julio, el tribunal laboral ordenó a Airbus Atlantic pagar 96.000 euros en concepto de indemnización a un empleado de Nantes. El tribunal habla de un despido “sin causa grave y real”, según un comunicado de prensa de la CGT Airbus Nantes que saluda una “victoria”. El secretario general de esta rama sindical, Eric Delobelle, precisa que el trabajador sindicalizado había sido despedido hace más de dos años y medio “por incumplimiento del uso del gorro de seguridad y la mascarilla (covid-19)”. El sindicato decidió entonces llevar el caso de su miembro a los tribunales.
“Este empleado, un técnico de mantenimiento reconocido por 30 años en la empresa como un muy buen profesional, se vio en el espacio de un solo año convocado a múltiples entrevistas disciplinarias. Su trayectoria profesional hasta ahora ha sido impecable tanto en lo profesional como en lo conductual”, continúa Eric Delobelle en el comunicado de prensa. Para la CGT, “esta situación se asemeja mucho a una implacabilidad por parte de la dirección”.
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Contactada por Le Figaro, esta última se defiende: “el empleado en cuestión ya había sido objeto de varias advertencias e incluso sanciones disciplinarias por infracciones graves a las normas de seguridad, insubordinación e incumplimiento de las normas internas”. Airbus Atlantic también indica que apelará. “Su negativa manifiesta y reiterada a cumplir con los requisitos de seguridad así como sus numerosas conductas de riesgo, a pesar de las sanciones educativas aplicadas, no dejaron a Airbus Atlantic más remedio que rescindir su contrato laboral, por su seguridad y la de sus compañeros”, continúa la dirección.
Más allá de esta historia, Eric Delobelle apunta a la política de seguridad de la empresa: “Esta es una de las áreas que han puesto en marcha para combatir los accidentes. Hay sanciones cuando hay desviaciones, pero estas sanciones son mucho más numerosas que antes”.
