Entre la Agrupación Nacional (RN) y su aliado alemán Alternative für Deutschland (AfD), el trapo está ardiendo. El partido ha anunciado que ya no quiere sentarse junto a AfD en el grupo político Identidad y Democracia (ID) durante la próxima legislatura en el Parlamento Europeo, indica RN en Le Figaro, confirmando las informaciones de nuestros colegas de Libération.

Una decisión que llega tras las polémicas declaraciones de Maximilian Krah, que actualmente forma parte junto a Jordan Bardella en el grupo Identidad y Democracia (ID). Este último había argumentado el 18 de mayo en una entrevista con el periódico italiano La Reppublica que un “SS no era automáticamente un criminal”. “Nunca diría que cualquiera que vistiera un uniforme de las SS fuera automáticamente un criminal (…). La culpa debe evaluarse caso por caso”, afirmó el político.

Este último había citado como ejemplo el caso del escritor Günter Grass, Premio Nobel de Literatura, que pasó por las filas de esta terrible organización – que tenía entre sus responsabilidades en particular la organización del exterminio de los judíos -, antes de presionar a la Resalte: “Entre los 900.000 SS, también había muchos campesinos: ciertamente había un alto porcentaje de criminales, pero no sólo eso”.

Una declaración que ratifica la ruptura de las ya tensas relaciones entre los dos antiguos aliados políticos, a pocas semanas de las elecciones europeas que deberían perfilar los contornos de los grupos políticos presentes en el Parlamento Europeo desde hace cinco años.

El partido de extrema derecha alemán ya había despertado la ira de Marine Le Pen en varias ocasiones. Alice Weidel, copresidenta de AfD, cuestionó en abril pasado la vinculación de Mayotte a las Comoras, en el mismo momento en que Marine Le Pen estaba de visita allí. “El AfD haría mejor en abordar los problemas de Alemania y estoy enojado por esta situación”, criticó duramente este último.