Tras el Senado, la presidenta de la Asamblea Nacional, Yaël Braun-Pivet, denunció el comportamiento de la cabildera Phyteis, que representa a 19 fabricantes de pesticidas, a quienes acusa de haber «violado el código de conducta de la Asamblea Nacional», supo este lunes la AFP.
El titular de la percha “puso aviso” a Phyteis el 30 de junio, pidiéndole “respetar las obligaciones éticas a las que están sujetos los representantes de intereses”. El Senado había dado el mismo paso a principios de mayo, el primero desde la creación de este procedimiento por la ley «Sapin II» del 9 de diciembre de 2016. Este «aviso formal» de la Asamblea sigue un informe del diputado del PS por Meurthe – et-Moselle Dominique Potier y cuatro asociaciones.
El responsable de ética de la Asamblea Nacional, Jean-Éric Gicquel, consideró inicialmente que Phyteis “había carecido de prudencia y rigor en sus contactos con los diputados”, según un comunicado de prensa de la presidencia de la Asamblea. Phyteis “había indicado a los diputados que 2.700 puestos de trabajo directos y 1.000 puestos de trabajo indirectos estaban amenazados por la prohibición, prevista por la ley del 30 de octubre de 2018 conocida como la “ley Egalim”, de producir, almacenar y circular en Francia, a partir del 1 Enero de 2022, pesticidas que contienen sustancias prohibidas en la Unión Europea”, indica la presidencia. Pero el oficial de ética “encontró que Phyteis no había podido explicar de manera objetiva y cuantificada la metodología utilizada”.
A pedido de Yaël Braun-Pivet (Renacimiento), “Phyteis no pudo proporcionar elementos adicionales que puedan cuestionar el hallazgo de incumplimiento establecido por el Oficial de Ética”, agrega el comunicado de prensa de la Asamblea. “El presidente, por lo tanto, señala que las acciones de Phyteis constituyen una violación del código de conducta de la Asamblea Nacional aplicable a los representantes de intereses, que establece que la información proporcionada por los representantes de intereses “no debe contener elementos deliberadamente inexactos destinados a inducir a error a los diputados”, concluye. Yaël Braun-Pivet.