El fabricante de motores de avión CFM ha alertado a sus clientes sobre piezas cuyos documentos de certificación han sido «falsificados» por un proveedor, según supo el lunes la empresa conjunta de Safran y GE.

Los motores en cuestión son del tipo CFM56 y equipan tanto al Airbus A320 como al Boeing 737 NG, dos generaciones de aviones de pasillo único de medio radio que ahora han sido sustituidos por el A320neo y el 737 MAX, respectivamente. Estos utilizan, en particular, reactores “Leap” de nueva generación de CFM, no afectados por la alerta. No se dieron detalles sobre el número de motores potencialmente afectados, en este caso señalado por la agencia Bloomberg. Del CFM56 se produjeron 34.000 copias.

Por su parte, la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA), informada por CFM, ha abierto una investigación sobre la empresa británica AOG Technics, sospechosa de haber distribuido «piezas no aprobadas» a talleres de mantenimiento. «Varias piezas de los motores CFM56 distribuidos por AOG Technics fueron suministradas con certificados falsificados», citaron los organismos de certificación, habiendo indicado que los documentos en cuestión «no procedían de su organización», indicó la EASA en un comunicado de prensa publicado el mes pasado.

Contactada por la AFP, AOG Technics no respondió al teléfono de su sede de Londres el lunes al mediodía. Su sitio web también era inaccesible. «Apoyamos plenamente la investigación de los reguladores sobre los documentos de certificación falsificados que acompañan a las piezas vendidas por AOG Technics», dijo un portavoz de CFM en un comunicado. La empresa franco-estadounidense subrayó que no tenía ninguna relación con AOG Technics, ni directamente ni a través de sus empresas matrices. «Hemos tomado la iniciativa de alertar a nuestros clientes y talleres de servicio, y seguimos trabajando con nuestros clientes para evaluar la autenticidad de los documentos de las piezas obtenidas directa o indirectamente de AOG Technics», según la misma fuente.

EASA exigió a los propietarios u operadores de aeronaves y a las organizaciones de mantenimiento que «inspeccionaran sus registros para determinar si alguna pieza de aeronave o motor se obtuvo de AOG Technics, directa o indirectamente», y verificaran la autenticidad de sus certificados. En caso de manipulación comprobada, “cualquier parte afectada deberá segregarse para impedir su instalación”, añadió EASA. Si las piezas ya están instaladas, la agencia recomienda reemplazarlas con piezas aprobadas.