Rachid M’Barki, un experiodista de BFMTV despedido tras sospechas de injerencia extranjera en su trabajo, se declaró inocente y se sintió el miércoles objeto de «acusaciones injustas» en su primer discurso público desde su arresto. Fue interrogado durante dos horas por una comisión parlamentaria de investigación sobre la injerencia extranjera, presidida por el diputado de RN, Jean-Philippe Tanguy.

“En los últimos años, he tenido la satisfacción de copresentar el programa “Trae a los acusados”, pero sin saber que soy yo quien me encontraría en el banquillo, espectador de mi matanza profesional”, dijo Rachid M’Barki . “Se me acusa de haber fallado en mi ética profesional al pasar al aire información no verificada y sugerir que me habrían pagado por ello. Todo eso es falso y es pura calumnia”, dijo, denunciando un “linchamiento mediático”.

Presentador de los diarios nocturnos de BFMTV y de «Trae a los acusados» en RMC Story, fue despedido en febrero por falta grave del grupo Altice, al que pertenecen estos canales. Se ha presentado una denuncia contra X por corrupción pasiva y abuso de confianza. En cuestión, sospechas de injerencia extranjera en su labor como presentador de los diarios nocturnos de BFMTV. Se trataba de una docena de informes ilustrados con imágenes, relacionadas en particular con los oligarcas rusos, Qatar o el Sáhara Occidental.

Rachid M’Barki estuvo implicado en una investigación internacional del colectivo de periodistas Forbidden Stories, a la que contribuyeron por Francia la unidad de investigación de Radio France y Le Monde. Publicada a mediados de febrero, esta investigación apuntaba a las actividades de una empresa israelí, apodada «Team Jorge», especializada en desinformación en beneficio de varios clientes, incluidos los estados. Sin cuestionar el conjunto de esta investigación, Rachid M’Barki aseguró que su «supuesta implicación» era «una fábula».

“Si al frente de esta investigación podemos blandir la cabeza de un presentador de noticias de televisión de una cadena importante, cuyo nombre y rostro son poco conocidos por los franceses, entonces ahí estamos creando un negocio”, a- dijo, apuntando al Periodista de Radio Francia que participó en la investigación. Rachid M’Barki admitió que el cabildero Jean-Pierre Duthion, citado en la investigación de Forbidden Stories, era uno de sus «informantes». Pero aseguró que «en ningún momento tuvo la impresión (…) de que podía trabajar para alguien que intentaba manipular la información».

Rachid M’Barki, sin embargo, admitió haber difundido imágenes proporcionadas a petición suya por este lobista, en particular sobre un foro económico entre Marruecos y España organizado en junio en el Sáhara Occidental. “Eran imágenes neutrales”, argumentó. Relanzado por un diputado, admitió que «pudo haber sido necesario» mencionar en estas imágenes el hecho de que provenían de una fuente externa.

«Puede ser un error no haberlo hecho, es mi error o el error de la jerarquía que validó estas imágenes» antes de su publicación, se defendió. ¿Ha sido manipulado? “Hoy digo que no”, martilleó, volviendo a las declaraciones publicadas a principios de febrero por el sitio Político, que fue el primero en denunciar las sospechas que pesaban sobre él. La comisión de investigación debe escuchar al director general de BFMTV, Marc-Olivier Fogiel, el jueves.