El rey de los zulúes, el gobernante consuetudinario más poderoso de Sudáfrica, aseguró este lunes a la AFP que se encuentra «en buena forma», tras la muerte repentina de uno de sus asesores cercanos que temía envenenamiento.

«Estoy muy bien, estoy en forma y fuerte», dijo Misuzulu Zulu por teléfono desde el pequeño estado vecino de Eswatini, donde se encuentra para controles médicos.

Misuzulu Zulu, de 48 años, también conocido como Misuzulu kaZwelithini, llegó al trono el año pasado tras la muerte de su padre, Goodwill Zwelithini, luego de una amarga batalla familiar por la sucesión. El rey Zwelithini, que murió después de más de 50 años de reinado, dejó seis esposas y al menos 28 hijos. En un comunicado emitido durante la noche del sábado al domingo, el influyente primer ministro zulú tradicional, Mangosuthu Buthelezi, dijo que había sido informado de que Misuzulu Zulu había sido hospitalizado «después de enfermarse más temprano en el día» el sábado.

Preguntado por AFP, el rey dijo el lunes que «nunca» había sido hospitalizado en los últimos días. «Era un chequeo de rutina que hago cada tres meses, a veces cada seis meses», dijo. El portavoz del rey, el príncipe Africa Zulu, dijo el domingo que el soberano se sometió a exámenes médicos «exhaustivos» en Eswatini tras la repentina muerte de uno de sus asesores más cercanos que le hizo temer riesgos de envenenamiento, y que se encontraba «en perfecto estado de salud».

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El lunes, el portavoz dijo a la AFP que el rey había pasado el día trabajando, en particular reuniéndose con una delegación china, sin más detalles. El domingo, el Príncipe Africa Zulu había denunciado un «intento orquestado» de hacer circular «información sin fundamento sobre la salud de Su Majestad». El rey prefirió buscar tratamiento en Eswatini en lugar de Sudáfrica, donde sus padres «fueron tratados y murieron», agregó, expresando su «gran preocupación».

El portavoz del rey no dijo cuándo se esperaba que Misuzulu Zulu regresara a Sudáfrica. En el país del sur de África, los soberanos y jefes tradicionales están reconocidos por la Constitución. Reyes sin poder ejecutivo, ejercen una profunda autoridad moral y son reverenciados por su pueblo. El país con 11 idiomas oficiales tiene 11 millones de zulúes, o casi uno de cada cinco sudafricanos. En septiembre, un concejal de Misuzulu Zulu fue asesinado a tiros misteriosamente al margen de una ceremonia tradicional.