(Toronto) El sistema de transporte público debería funcionar con normalidad el viernes en Toronto, ya que los empleados de la Comisión de Tránsito y su empleador llegaron a un acuerdo en el último minuto para evitar el inicio de una huelga.

El jueves por la noche, las conversaciones entre el sindicato y el empleador fracasaron, después de varios meses de negociaciones.

Según el sindicato, el acuerdo del jueves incluye beneficios para los trabajadores en cuestiones clave como salarios, beneficios y seguridad laboral. Por lo tanto, el sindicato está “en suspenso” su amenaza de huelga mientras concluye las discusiones que conduzcan a un acuerdo final.

Por su parte, la Comisión de Tránsito de Toronto argumentó que el acuerdo es justo y respetuoso del importante trabajo realizado por los miembros del sindicato.

La huelga que amenazaba con convocarse el viernes por la mañana habría paralizado la ciudad más poblada de Canadá, inutilizando su flota de metros, tranvías y autobuses. Los impactos también se habrían sentido en la red vial, donde necesariamente habría habido un mayor volumen de tráfico.

La última huelga del transporte en Toronto tuvo lugar en 2008. Terminó menos de dos días después, cuando el gobierno provincial legisló para que los empleados volvieran a trabajar, a petición del alcalde.