Emmanuel Macron comparó, este miércoles 24 de mayo en el Consejo de Ministros, la violencia “cualquiera que sea la causa” con un “proceso de descivilización”, según un participante en la reunión, confirmando información del parisino.
“Tienes que ser intratable en los méritos. Ninguna violencia es legítima, ya sea verbal o contra las personas. Debemos trabajar a fondo para contrarrestar este proceso de descivilización”, declaró el Presidente de la República, según esta fuente.
Esta expresión pretende ser un “cuestionamiento de la sociedad” sobre sí misma, porque “el político no es el único responsable”, explicó además un allegado al jefe de Estado citado por el parisino. Aunque la violencia, contra funcionarios electos o funcionarios públicos, no siempre es de la misma naturaleza, Emmanuel Macron subrayó que «no hubo violencia que sea justificable, nunca, en una sociedad, sea cual sea la causa».
El portavoz del gobierno, Olivier Véran, expresó su preocupación, al día siguiente de la muerte de una enfermera en el Hospital Universitario de Reims, por la ausencia de «restricción, la capacidad de respetar a la persona que salva la vida de las personas y la propia». Un minuto de silencio, en presencia en París de la Primera Ministra Elisabeth Borne, se guardó en todos los hospitales de Francia en memoria de esta enfermera, Carène Mezino, asesinada por un hombre que padecía trastornos psiquiátricos. “Preguntémonos por una sociedad en la que la gente que cuida, la gente que cuida, la gente que lleva la blusa, la gente que dedica sus días, sus noches, a preservar la salud de los demás, está amenazada. Ya no existe ni siquiera este límite, esta restricción, la capacidad de respetar a la persona que salva la vida de las personas y de uno mismo”, declaró Olivier Véran a la prensa tras el Consejo de Ministros.
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Emmanuel Macron, por su parte, deberá acudir este jueves a Roubaix para rendir homenaje a tres jóvenes policías fallecidos el domingo en una colisión con un vehículo cuyo conductor era muy alcohólico y drogado. Los partidos de izquierda han convocado una gran manifestación el miércoles en Saint-Brevin-les-Pins para apoyar la dimisión del alcalde de este municipio de Loire-Atlantique, que se ha convertido en el símbolo de los funcionarios electos locales víctimas de la violencia.