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Lanzarote, la tercera isla más grande de las Islas Canarias, ofrece un clima soleado y templado durante todo el año, con una temperatura media de 23°C. Durante las fiestas de Todos los Santos podrás disfrutar de las playas y del gran parque nacional de Timanfaya. En familia, haz un recorrido por la isla para admirar la arquitectura y las obras del artista César Manrique.

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Destino de ensueño para visitas culturales y compras, Londres es una cita obligada en otoño. En tren o avión, llega a la capital del Reino Unido para participar en las festividades de Halloween. En el programa: museo de los horrores en la Torre de Londres, Ghost Bus por la ciudad o incluso una visita a los estudios de Harry Potter.

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La segunda ciudad de Portugal, Oporto, se puede visitar en todas las estaciones. En otoño, las temperaturas rondan los 20 grados, una oportunidad para visitar la ciudad a pie y explorar el valle del Duero. Una vez allí, tómate el tiempo para detenerte en el Mercado do Bolhão para degustar las especialidades locales.

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¿Quieres abastecerte de vitamina D? Rumbo hacia Creta, la mayor de las islas griegas. Los días son hermosos y soleados, lo que le permitirá disfrutar de las bonitas playas, visitar los pueblos coloridos y auténticos o caminar por las gargantas de las Montañas Blancas.

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Apodada la ciudad de las cien agujas, Praga deleita a los viajeros con sus joyas arquitectónicas, su rica historia y sus legendarios cafés en las calles del casco antiguo. En el fondo, el Puente de Carlos es uno de los monumentos más emblemáticos de la capital checa.

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